Como Marcos Antonio Rangel Saveedra, de 53 años de edad, quedó identificado el cuerpo que fue arrollado en horas de la mañana de ayer en la avenida Florencio Jiménez, a una cuadra del Comando Regional número 4.
Se desconocen mayores detalles, pero se sabe que Rangel intentó pasar la arteria vial cuando fue arrollado por un vehículo que, luego de lo sucedido, se dio a la fuga y aún no ha sido aprehendido por los cuerpos de seguridad. El hecho se produjo a las 5 a.m. de este sábado. La víctima fue llevado a la Emergencia del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales Pastor Oropeza, donde llegó sin signos vitales a causa de las lesiones.
Posteriormente, sus restos mortales fueron trasladados a la morgue del Hospital Central Antonio María Pineda donde fue retirado por sus familiares y dolientes.
Extrañas circunstancias
En otro suceso, un sargento segundo de la Policía del Estado Lara en condición de retiro desde hace 23 años, fue encontrado muerto en la esquina de la calle 5 con avenida principal de El Cují, al norte de la ciudad. Aunque no presentó signos de violencia ni heridas de ningún tipo, familiares de Joel Adames Pernalete, de 78 años de edad, esperaron la actuación del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas que descartase la hipótesis de una intervención de un tercero.
Se conoció que el sargento murió de un ataque al corazón, aunque se desconoce si lo sufrió sin causa aparente o, como presumían algunos, pudo haberle afectado después de un intento de robo. Se conoció que el occiso era hipertenso y, recién el miércoles pasado, habría acudido al médico para un chequeo de rutina donde le indicaron su buen estado de salud. Es por ello que, se llevan adelante las investigaciones para corroborar la naturalidad de su muerte. El anciano vivía por la zona y era padre de 7 hijos, además de ser abuelo en más de 15 oportunidades. Sus familiares lo recordaron como una «excelente persona».
