El ciclista barinés Jonathan Monsalve, del equipo italiano Yellow Fluo, fue el principal protagonista dentro de una fuga que dominó por un largo trecho la séptima etapa de la Vuelta a Malasia y coqueteó con el liderato de la prueba, aunque sus posibilidades fueron pulverizadas en los últimos kilómetros cuando el pelotón grande capturó a los escapados y provocó que todo se decidiera en una llegada en bloque.
Monsalve se despegó del lote principal en los kilómetros intermedios, acompañado por otros tres corredores, y manejó una diferencia de poco más de cuatro minutos, situación que lo mantuvo como líder en carretera, después de amanecer en el puesto doce.
La aventura del oriundo de Barinitas, campeón de esta carrera en una oportunidad, concluyó a 15 kilómetros de la meta, cuando el pelotón, empujado por el equipo del iraní Mirsamad Pourseyedigolakhour, lo atrapó para neutralizar sus aspiraciones.
Entonces, la etapa se decidió en embalaje final y resultó vencedor el belga The Bos, mientras que Monsalve llegó en el paquete principal, con tiempo de 5 horas, 33 minutos y 12 segundos. Carlos Ochoa, el otro criollo que participa en la prueba y ficha del Androni, entró de 81, con 15 segundos de retraso.