El presidente de la república anunció la decisión de romper relaciones políticas y diplomáticas con Panamá, por presuntamente estar vinculada en “conspiraciones” contra Venezuela.
Así mismo, se congeló todas las relaciones comerciales y económicas “desde este momento”, dijo el primer mandatario nacional, «a Venezuela se la respeta y no voy a aceptar que nadie conspire contra para pedir una intervención».
Se refirió a su homólogo panameño como “lacayo rastrero”, por su presunta vinculación en hechos de desestabilización en Venezuela.
De la misma manera, hizo un llamado a secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, a no inmiscuirse en los problemas en Venezuela, “no hemos solicitado una discusión de la situación interna de la OEA, a Venezuela no entra ninguna comisión, la OEA es un organismo moribundo y si lograran autonominarse una delegación, tendrán que entrar clandestinamente, La OEA no entra a Venezuela para ningún tipo de política intervencionista, ni ahora ni nunca».
Estas declaraciones fueron emitidas desde el cuartel de la montaña, durante los actos en homenaje al expresidente Hugo Chávez tras un año de su muerte.