Ante la situación de crisis que se está viviendo en este momento, que ha originado masivas manifestaciones callejeras y el surgimiento de hechos de violencia que merecen ser investigados profundamente, el conocido politólogo y profesor universitario Piero Trepiccione plantea la necesidad de retomar el juego de la política.
Esto quiere que tanto el gobierno como la oposición tienen que volver a los procesos de diálogo real, sincero y de acuerdos en torno a lo que debe ser el proyecto de país.
Un proyecto de país no se puede construir con una mayoría simple (con un 51 por ciento de apoyo contra el 49 por ciento que esté en desacuerdo) o viceversa, precisa. Se necesita de una mayoría calificada, que esté por encima del 70, 80 ó 90 por ciento de la población, se sienta identificada al menos en los puntos centrales relativos.
Desde luego, hay que renunciar a la violencia y a la guerra, sostiene. Cuando no se trabajan los problemas sociales y políticos en el marco de la política, renunciamos a resolverlos de manera consensuada, plural, inteligente.
Desde el gobierno se deben emitir señales de amplitud, de alta política de Estado, que no busquen instaurar una hegemonía partidista, sino, por el contrario, un proyecto de país.
Una hegemonía partidista hace que la gobernabilidad se vaya al piso, advierte. Al no haber gobernabilidad estaremos afectados permanetemente por el proceso de polarización y así no vamos a avanzar a ninguna parte. El país se va a despedazar.
El problema que tenemos actualmente es que desde el gobierno se ignora políticamente a la mitad de la población, que no comulga con el proyecto de país que se está llevando a cabo.
No puede haber democracia cuando no hay respeto entre las partes, cuando se trata de imponer una hegemonía política con una mayoría simple, observa, Los voceros del Ejecutivo Nacional, empezando por el presidente de la República, deben abrirse a ese diálogo.