A través de un comunicado público, las federaciones de centros de estudiantes de las universidades: Central de Venezuela, Católica Andrés Bello, Monte Ávila, Metropolitana y Simón Bolívar, condenaron la violencia que se ha presentado en todo el país.
«El Movimiento Estudiantil rechaza categóricamente la violencia que ha vivido el país en los últimos días, producto de la represión a la voz de protesta ciudadana. Responsabilizamos al Gobierno nacional de usar la represión como una arma para enfrentar el descontento social. Exigimos que se haga justicia a quienes ordenaron y cometieron los crímenes de asesinatos, torturas y violaciones», sentencian.
Los jóvenes exigen que cesen de manera inmediata los abusos de poder y las violaciones a los Derechos Humanos ejecutadas por los miembros de la Fuerza Armada Nacional (FAN).
Asimismo reclamaron el desarme inmediato de los grupos «paramilitares» que a su juicio, se hacen pasar por colectivos comunitarios causando terror a la sociedad venezolana.
Pidieron a la sociedad civil que inunde el país de flores blancas, para seguir protestando pacíficamente contra las injusticias y el incumplimiento de la ley.
De hecho, armados con flores blancas, unos 500 estudiantes venezolanos se reunieron este jueves en Caracas para exigir el cese de la violencia.
Una leyenda de «SOS», salpicado de flores y banderas de Venezuela, fue formada por un grupo de jóvenes que, desafiando un Sol inclemente, se tiraron en el pavimento mientras el resto guardaba minutos de silencio por cada una de las víctimas fatales de las protestas opositoras.