Desde temprano, estudiantes de las diferentes carreras universitarias que se cursan en la Universidad Fermín Toro, con sede en El Ujano, al este de la ciudad, marcharon por las calles de Barquisimeto sumándose a las protestas escenificadas a lo largo del país.
En este caso, la acción de calle que recorrió parte de la Hermann Garmendia, tomó la avenida Libertador, cruzó en la Argimiro Bracamonte, empalmó la Lara y subió hasta el Rectorado de la UCLA en la carrera 19, para tomar un segundo aire y sumarse a las otras protestas que organizaron las demás casas de estudio de la ciudad, y que partirían desde el Obelisco hasta un destino común: la sede de la Defensoría del Pueblo, con la intención de exigir el “cumplimiento de la ley” cuando se trata de dispersar concentraciones de calle.
Alfredo Márquez, estudiante de segundo año de Derecho de la UFT y miembro del Movimiento Estudiantil de esa casa de estudios, responsabilizó a la GNB y a los organismos de seguridad de “uso desproporcional de la fuerza”. En este sentido, otra de la finalidad de la actividad emprendida en el día de ayer, era la exigencia del respeto «por el derecho a la protesta y a la libertad de expresión».
El líder estudiantil dijo que el movimiento permanecerá en la calle. «¡No vamos a desmayar!».
Agradeció a la sociedad civil que se ha integrado a las constantes concentraciones en El Cardenalito del Este. Comentó que la intención es que «el Gobierno cambie sus políticas públicas y, si no se siente capaz, pues que renuncie».
Yeraldine Napoli, estudiante activa en la marcha, comentó que se sumó a la protesta por «sentirme cansada de no poder reunirme tranquilamente con la familia sin el temor a que seamos víctimas de la inseguridad».
