Claudio Paolillo, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, condenó la obligada salida del aire de las cableras del canal de noticias NTN24, el único que transmitió imágenes sobre las marchas de la oposición y oficialismo de este 12 de febrero.
“El gobierno de Venezuela está decidido a callar todas las voces que puedan ser independientes o críticas. Es una grosera censura del gobierno del señor Nicolás Maduro”, expresó en declaraciones a ese canal.
Por su parte José Miguel Vivancos, director para las Américas de Human Rights Watch, calificó la actuación ordenada por un Conatel de «un abuso más» la medida que sacó al canal de la grilla de programación.
«Es un acto de censura incuestionable por parte del gobierno de Venezula la sanción que sufre NTN24. Es un hecho de censura que, felizmente, no es la práctica de los gobiernos democráticos de la región, que no recurren a este mecanismo aún y cuando enfrenten protestas sociales», opinó en declaraciones a la televisora.