La legendaria actriz estadounidense Shirley Temple, quien fuera la niña estrella más célebre de la historia de Hollywood y derritiera los corazones norteamericanos durante la época de la Gran Depresión, falleció a los 85 años, informó su familia este martes.
Temple Black, que a sus seis años se convirtió en la actriz más joven en recibir un premio Oscar, murió el lunes por la noche de causas naturales, rodeada de su familia y amigos.
«Anunciamos con gran pesar que la embajadora Shirley Temple Black, exestrella infantil de Hollywood y por siempre la ‘querida de América’, falleció pacíficamente en su casa de Woodside, California, de causas naturales», señaló la familia en un comunicado.
«La saludamos por una vida de destacados logros como actriz, como diplomática, y más importante como una querida madre, abuela y adorada esposa durante 55 años del fallecido y extrañado Charles Alden Black», agrega.
Temple, que protagonizó más de 40 películas, la mayoría de ellas antes de los 12 años, logró taquillas que superaron a las de actores como Clark Gable o Gary Cooper.
Actriz, cantante y bailarina, dejó la profesión a fines de los años 1940 para pasarse a la política y luego a la diplomacia. Fue elegida congresista por el Partido Republicano en 1967, fue embajadora en las Naciones Unidas (1969-1970), luego en Ghana (1974-1976) y en Checoslovaquia (1989).
Risitos de oro
La icónica estrella infantil de los años 1930 supo derretir al público con sus risos dorados y su amplia sonrisa, convirtiéndose en un pequeño brillo en el Estados Unidos de la Gran Depresión.
Haciendo las delicias del público con su canto, baile y dulce inocencia en una época en la que el dinero y el trabajo escaseaban y la vida diaria resultaba particularmente dura, la protagonista de «Curly Top» y «The Little Princess» recibió a sus seis años el Oscar honorífico en 1935.
Reinó en la taquilla estadounidense durante tres años consecutivos, desde 1936 a 1938.
El entonces presidente estadounidense Franklin D. Roosevelt destacó su «contagiante optimismo» y declaró que «siempre que tengamos a Shirley Temple, todo estará bien».
Más tarde debió hacer frente a la lucha contra el cáncer.
Nacida el 23 de abril de 1928, en Santa Monica, California, Shirley Jane Temple debutó en los «Baby Burlesques», cortometrajes que parodiaban las grandes producciones de la época pero protagonizadas por niños.
Así, imitó a la diva Marlene Dietrich y a la pareja de Tarzán, Jane, entre otras.
Luego de que los controvertidos filmes fueran prohibidos en 1933, la estrella infantil se volcó a grandes producciones y protagonizó «Stand Up and Cheer» al año siguiente.
Posteriormente realizó varias películas, incluyendo «Bright Eyes», con su característica melodía, «On the Good Ship Lollipop», «Heidi» y «Rebecca of Sunnybrook Farm».
Motivada por su madre, que le decía «brilla, Shirley, brilla», se convirtió en una popular estrella infantil.
Aunque durante su juventud protagonizó filmes como «The Bachelor and the Bobby Soxer» con Myrna Loy y Cary Grant y «Fort Apache» con John Wayne, Henry Fonda y John Agar, su primer esposo, su carrera no contó con el brillo que había logrado durante sus primeros años.
Tras divorciarse de Agar, conoció a su segundo esposo, Charles Black, con quien se casó en diciembre de 1950, y continuó actuando en televisión y radio.
En la década de 1960 asumió un nuevo papel en la política, como representante ante las Naciones Unidas durante la presidencia de Richard Nixon. Luego fue embajadora estadounidense en Ghana y Checoslovaquia.
Temple fue agasajada por el prestigioso Kennedy Center Honors en 1998, y fue nombrada como una de las grandes estrellas cinematográficas de la historia por la revista Premiere y Entertainment Weekly.
También figura en la lista del American Film Institute de las 50 leyendas de la gran pantalla.
Su esposo Charles Black falleció el 4 de agosto de 2005.
Temple deja tres hijos, Lori, Charlie y Linda.