Científicos del Centro de Investigación del Cáncer Fred Hutchinson de Seattle, en Estados Unidos, aseguran que las mujeres jóvenes que fuman pueden tener más riesgo de sufrir cáncer de mama con receptores de estrógenos positivos, uno de los tumores mamarios más comunes, según los resultados publicados en la revista «Cancer».
En concreto, vieron que las mujeres de entre 20 y 44 años que fumaban un paquete de tabaco al día durante al menos diez años tenían un riesgo un 60 por ciento mayor de desarrollar estos tumores en comparación con aquellas que fumaban menos. En cambio, no había más probabilidades de padecer un cáncer de mama triple negativo, un subtipo menos frecuente pero más agresivo. «Creo que cada vez hay más evidencia de que el tabaquismo también es un peligro para el cáncer de mama», ha reconocido Christopher Li, principal autor del estudio.
Investigaciones previas habían apuntado ya algunos vínculos entre el consumo de tabaco y el cáncer de mama, pero los resultados en mujeres jóvenes no eran concluyentes ya que había dudas de que se asociara a un mayor riesgo de todos los subtipos de tumores mamarios. Para comprobar esta asociación, analizaron todos los casos de cáncer de mama detectados en el área de Seattle entre 2004 y 2010.
En ese periodo hubo un total de 778 mujeres diagnosticadas con el subtipo más común, el de receptores de estrógenos positivos, mientras que a 182 se detectó un tumor de mama triple negativo. Asimismo, también incluyeron en el estudio a 938 mujeres sin cáncer.
Según el Instituto Nacional del Cáncer, una de cada ocho mujeres estadounidenses desarrollarán cáncer de mama, pero el riesgo es más bajo a edades más jóvenes. En el estudio vieron que las mujeres jóvenes que han fumado alguna vez tenían un 30 por ciento más de probabilidades de desarrollar cualquier tipo de cáncer de mama, en comparación con las mujeres que nunca fumaron. Pero cuando los investigadores analizaron el aumento de riesgo por cada subtipo, vieron que dicho incremento no se producía en mujeres con triple negativo.
Y al medir la prevalencia del tabaquismo vieron que las que habían fumado durante al menos 15 años eran un 50 por ciento más propensas a desarrollar un cáncer de mama con receptores de estrógenos positivos, en comparación con las que fumaban menos años. Y las que fumaban al menos un paquete al día durante 10 años, el riesgo era un 60 por ciento mayor.
Esto podría deberse, según los autores, a que las sustancias que se encuentran en los cigarrillos actúan como estrógenos y favorecen el desarrollo del tumor. «Hay muchos productos químicos diferentes en el humo del cigarrillo que pueden tener muchos y diversos efectos», ha reconocido Li.