El papa Francisco tildó este lunes el Holocausto de millones de judíos durante la Segunda Guerra Mundial como una «vergüenza para la humanidad», en una carta enviada al rabino argentino Abraham Skorka y que será leída en Roma durante un concierto de violines único.
La carta, escrita a mano y en español, será leída esta noche en el auditorio romano Parque de la Música con ocasión del concierto «Los violines de la esperanza», con el que se conmemora la liberación en 1945 del campo de exterminio nazi de Auschwitz (Polonia).
Doce violines y un chelo, todos instrumentos que sobrevivieron al Holocausto, cada uno con su propia historia dramática y que fueron restaurados por el luthier israelí Amnon Weinstein, recordarán al público una de las mayores tragedias de la humanidad, en la que fueron exterminados seis millones de judíos.
Con notas proveniente de uno de los doce violines, los deportados ingresaban a las cámaras de gas de Auschwitz para ser exterminados.
Un violín fue arrojado desde un tren durante el viaje hacia los campos de concentración y fue recogido y conservado por un obrero francés.
También hay varios violines de los músicos judíos que en 1936 huyeron de Alemania y formaron la Orquesta Filarmónica de Palestina, luego de Israel.
El concierto será ejecutado por músicos representantes de las tres religiones monoteístas, con el objetivo de mostrar que la música une y no divide.
En la carta, el papa argentino invita a quien escuche la música que proviene de esos violines a «ensimismarse en aquellas lágrimas históricas, que hoy llegan a través de los violines, y sentir vergüenza por la humanidad».
El programa incluye música de Vivaldi, Beethoven y otros compositores, «pero el corazón de cada uno de los presentes sentirá que detrás del sonido de la música vive el sonido silencioso de las lágrimas históricas, lágrimas de aquellas que dejan huella en el alma y en el cuerpo de los pueblos», recalca el pontífice.