Cuando se trata de analizar la situación económica del país y las medidas que deben adoptarse, debemos referirnos a la intervención del presidente de la República, Nicolás Maduro, cuando declaró que haría anuncios sobre el particular al presentar la Memoria y Cuenta.
Esta, en primer lugar, es una obligación constitucional que tiene el presidente de la República, ante la Asamblea Nacional, al finalizar cada año de su gestión; pero, Nicolás Maduro no lo hizo, asienta el Dr. Edgar Urbáez, economista y abogado.
Lo que oímos fue un discurso, preñado de citas ideológicas, anacrónicas, que nada tienen que ver con la realidad.
La Memoria y Cuenta es una narración de los hechos cumplidos en el período considerado y cuáles fueron sus resultados, explica. Eso no ocurrió porque no fueron alcanzadas las metas en los ocho meses de su gobierno.
En segundo término, los anuncios que hizo en materia cambiaria, así como en producción de bienes y servicios, no reflejan la totalidad de la crisis económica que vive el país, ni tampoco se refirió a los aspectos fundamentales que afectan la economía nacional.
Decisiones
Ya el miércoles de esta semana, el Ejecutivo Nacional decidió un aspecto positivo en la política cambiaria, que ha acabado con la incertidumbre que predominaba hasta entonces.
Se ha establecido el cambio dual y anunciado que el Banco Central de Venezuela no irá a financiar el déficit fiscal en 2014.
Sin embargo, se mantiene la expectativa entre los empresarios, ya que han sido aprobados 42, 6 billones para las importaciones. Pero, esta cifra representa casi el 50 por ciento de lo aprobado el año pasado cuando la cantidad fue de 70 billones de dólares.
Otro detalle que se debe tomar en cuenta es que la banda superior adoptada es impredecible, porque dependerá de la diferencia que tenga la demanda de dólares.
Claro está que el dólar del Sicad constituye una devaluación, la cual es perjudicial para el funcionamiento de las empresas porque las planificaciones hechas han sido sobre el dólar de 6,30 bolívares y ahora pasan a la condición del dólar del Sicad.
Difícil será determinar la necesidad de cada empresa al mismo tiempo que el gobierno está estableciendo un plan nacional de intervenciones. Habrá que esperar el método a ser aplicado con tal fin.
“Aunque reconocemos como positivo la decisión tomada por el Gobierno en materia cambiaria, no podemos dejar de lado los procedimientos que se están empleando, los cuales son muy engorrosos y, cuando esto sucede, se prestan a la corrupción u ocasionan tardanzas en los trámites”.
El Gobierno ha señalado como causantes de la crisis a los viajeros, pero la realidad es que estos no son responsables de esa situación, porque muchos viajan por razones de salud, suscribir contratos con empresas. La crisis económica no se resuelve con decretos, sino con medidas que permitan que el país produzca lo que necesita y no depender de las importaciones.
Necesariamente, tiene que haber un cambio de modelo económico. Ya el Gobierno controla el dólar, precios, intereses, producción, distribución y en general todos los procesos productivos de las empresas públicas y privadas. Ejerce el control de la economía. Esto, históricamente, no ha tenido éxito.
Inflación
Importante es la producción nacional de bienes y servicios para que haya competitividad adecuada y, entonces, los precios bajan por sí solos. Esta es, por más que no lo quiera reconocer el Gobierno, una economía de mercado, que se mueve alrededor del capitalismo.
El año pasado, Chile cerró con una inflación anualizada de 1.5 por ciento, Estados Unidos también con 1.5, Colombia con 1.6 y Venezuela, 56.2 en cifras oficiales. “Pensamos que debe ser más alta”, indicó Urbáez.
Cuando el Ejecutivo Nacional aumenta en 10 por ciento el salario mínimo y las pensiones, está reconociendo la dificultad que existe para aumentar el poder adquisitivo del bolívar.
Circulante
Actualmente hay algo más de Un mil 200 millones de bolívares en el sistema financiero venezolano, que presionan sobre la inflación, ya que no hay cómo aplicar esa cantidad de dinero, toda vez que no hay suficientes bienes y servicios en el mercado.
A eso se agrega que el Presidente ha aumentado diez por ciento a todas las personas que devengan salario mínimo y a los pensionados del Seguro Social.
La economía venezolana tiene alrededor de 13 millones de trabajadores, de los cuales 6 millones están en el sector privado. La mayoría de los 3 millones y medio en el sector público gana salario mínimo. Ese incremento se convierte en sal y agua.
Como el Gobierno no ha tomado en cuenta el aumento generalizado de precios, los incrementos que haga el Ejecutivo no resuelve problema alguno.
Deudas
Esta situación de crisis ha hecho que el país esté muy mal en el resto del mundo. Venezuela en el sistema internacional es un país de alto riesgo. Y si recurre al crédito extranjero, entonces, tiene que pagar intereses excesivamente altos, entre 11 y 14 por ciento. Paga al Fondo Chino a través de la consignación de petróleo a futuro.
PDVSA refleja lo grave de la situación económica. Su deuda con el Banco Central de Venezuela es rededor de 65 mil millones de bolívares. Debe a las empresas mixtas con las cuales se asoció para la explotación de petróleo, más de 6 mil millones de dólares. Le adeuda a los proveedores internacionales y debe además cumplir los convenios internacionales suscritos con Cuba y demás las islas del Caribe. Esta tan mal esa empresa que no ha presentado su balance financiero en los últimos dos años.
Del ocultamiento de cifras se ha hecho cómplice el Banco Central y el Instituto Nacional de Estadísticas. A esto podemos agregar que se creó en octubre el Centro Estratégico de Seguridad y Protección de la Patria (Cessppa), que está a exclusividad del presidente de la República. Ahora él tiene la facultad de reservarse las informaciones y ordenar cuándo pueden ser publicadas.
