El gobierno venezolano cortó este viernes brutalmente los cupos anuales de dólares subvencionados para turistas que viajen a Perú, Costa Rica y el estado de Florida, argumentando que son centro de operaciones de mafias que revenden las divisas subsidiadas en el mercado negro.
En una publicación en la Gaceta Oficial, las autoridades detallaron los montos máximos a partir de este viernes según destino y duración del viaje, con el fin de racionalizar el uso de las divisas y combatir «las mafias organizadas» que adquieren dólares a tasa oficial para luego revenderlos en el mercado negro, donde se multiplica por diez su valor.
Según esa tabla, quienes vayan al estado de Florida (sureste de Estados Unidos), el principal destino de venezolanos, Perú o Costa Rica, recibirán casi cuatro veces menos dólares, de un máximo de 2500 dólares anuales a solamente 700. En el caso de Panamá, el monto tambien se reduce a 700 contra un valor anterior de 1.000.
En Venezuela, donde existe un férreo control cambiario desde 2003, el gobierno asigna a los ciudadanos, previo un complejo procedimiento burocrático, dólares fuertemente subvencionados para turismo.
Hasta esta semana las divisas se entregaban a la tasa oficial de 6,3 bolívares por dólar. Pero el miércoles, el gobierno anunció que la tasa para viajeros pasaría a ser de 11,3 bolívares por dólar.
Los destinos donde se redujo más la asignación de divisas son los que presentan mayor actividad de los llamados «raspacupos».
En jerga venezolana, «raspar» es pasar la tarjeta -a la cual el gobierno le ha asignado su cupo al dólar oficial- en puntos de venta de negocios en el extranjero.
Pero el comerciante, en vez de mercancia, entrega dinero en efectivo a cambio de una comisión que ronda el 10%. Con los dólares en el bolsillo, la persona regresa a Venezuela y los revende en el mercado negro, obteniendo una ganancia cercana al mil por ciento.