A las 10 y 25 de la mañana de este 23 de enero, inició la sesión especial Nº 1, del ayuntamiento palavecinense con motivo de festejarse los 110 años de fundación del diario EL IMPULSO.
El presidente de esa corporación edilicia, Leonardo Castañeda, instruyó al secretario de la cámara municipal leyera el orden del día para ser aprobada por unanimidad de los concejales.
Una comisión especial encabezada por la concejala Francys Barragán y seguida por Rafael Rodríguez Parra, trasladaron al presídium al periodista José Ángel Ocanto, jefe de Redacción de EL IMPULSO, quien al entrar al recinto, recibió un ensordecedor aplauso de los asistentes al evento.
Ocanto saludó con deferencia al arquitecto Juan Manuel Carmona, director de esta casa editora, así como a Gisela Schlaffer, gerente de Administración y Gisela Guevara, directora de Ediciones Especiales de EL IMPULSO.
Tanto el presidente como los demás miembros del cuerpo legislativo, saludaron con efusividad al invitado.
Inmediatamente, se escucharon las notas de los himnos de Venezuela, Lara y Palavecino, para luego leer el acuerdo de cámara y un resumen de la hoja de vida del orador.
El clarín de los libres
“Me emociona ver aquí a muchos amigos de EL IMPULSO, caras muy queridas en lo personal, y sé que están aquí, en esta sesión especial, atraídos por la idea de celebrar y festejar la hazaña de un periódico que arriba a 110 años en medio de indecibles dificultades”, fueron las primeras palabras de Ocanto antes de comenzar su discurso de orden.
Dijo que venir a Cabudare es motivo de profunda complacencia también en lo político, “porque como sabemos aquí se respira libertad”.
El himno del estado Lara -prosiguió-, habla de una frase hermosa: ‘Es el clarín de los libre’.
“Uno se puede venir desde Quíbor, atravesar Barquisimeto y venir a Cabudare, tocando ese clarín de los libres. Es una franja de la Bandera Nacional que puede iniciarse en Quíbor y terminar aquí en Cabudare”, puntualizó.
Refirió el periodista, que en conversación con los concejales, pudo observar que la herencia dejada por la saliente administración “es muy difícil de abordar, más no imposible”.
“Me dice el concejal Freddy Pérez que hay cinco mil ocupaciones en Palavecino, y la cámara municipal hace un esfuerzo para que el alcalde José Barreras, pueda entregar 40 mil títulos de propiedad, lo cual es la mejor salida para ese problema; que el aseo urbano pasaba por las comunidades cada 27 días y que ahora se hace un esfuerzo para que ahora pase tres veces por semana; eso es plausible porque es un esfuerzo ciclópeo”, comentó.
Era donde se cruzan las calles Lara y Comercio
“… Aquel viernes 1º de enero de 1904, desde el caserón construido por los Blanch, sede de la Imprenta Torres, justo donde se cruzan las calles Lara y Comercio, a un costado del Convento de Santa Lucía y a escasos palmos del Balcón de los Álvarez, justo desde ahí, emprendían vuelo jubiloso dos hojitas de 22 por 31 centímetros, en las cuales se hacía la más imprecisa de las precisiones: Era un diario que “circularía todos los días de labor sin hora fija”, acentuó el orador al referirse a la historia poco conocida de la génesis del diario centenario, mientras el auditorio atento permanecía en silencio por aquel fascinante relato, que según testimonios, “a más de uno trasportó a aquella remota época cuando don Federico, su esposa y hermano, emprendieron la empresa editora que hoy es referencia de democracia, de información veraz y oportuna.
Visiblemente emocionado pero a la vez con voz serena, Ocanto pronunció su discurso interrumpido a ratos por nutridos aplausos que no cesaban sino de nuevo no iniciaba la lectura.
La historia de los periódicos
Ciertamente Ocanto no agotó en su discurso los datos que mantuvieron al público y concejales extasiados, detallando la aparición de los primeros periódicos en Barquisimeto. Tampoco dejó pasar por alto la publicidad contenida en EL IMPULSO, lo que causó resonantes risas en el público.
“La Torcaz en El Tocuyo y Mi Cielo en Barquisimeto. Son las dos tiendas que venden más barato y más completo”. “Depurativo del Dr. Pérez Villanueva”. “Botiquín San Rafael. Centro de reunión y recreo”. “¡No hay más allá! Extracto de zarzaparrilla, de G. Sánchez”. “Gente pálida necesita tomar Emulsión de Scott. Hace sangre. Da fuerzas”.
Admiración por el Dr. Carmona
Varias páginas de su discurso, desarrolló Ocanto para describir la invariable posición del doctor Juan Manuel Carmona frente a la represión y el hostigamiento del Gobierno en contra de EL IMPULSO, señalando que el antiguo presidente del diario, sin vacilar argumentaba: No podemos bajar la guardia”. “Cuidado. ¡Que los lectores perciban nuestra invariable posición! Tenemos que mantenernos firmes”. En su boca, la enseña fundamental, en algún momento, pasó a ser: “Primero cerrados que arrodillados”.
«En homenaje a EL IMPULSO en la Academia de la Historia, en Caracas, en ocasión de los 100 años, el doctor Juan Manuel Carmona, director hasta su malhadada muerte en 2006, hizo esta reverencial memoria: “Juan Carmona, mi padre, fundó una segunda edición de EL IMPULSO, que se llamó El Pueblo, y circulaba en las tardes. Pero en uno de sus artículos, en El Pueblo, papá no tuvo la suficiente prudencia respecto al general Gómez, y entonces lo redujeron a la cárcel de La Rotunda. Le colocaron los respectivos grillos y le clausuraron EL IMPULSO”.
La tercera generación llegó con Gustavo Carmona, director por espacio de 28 años, entre 1967-1995, y el doctor Juan Manuel Carmona. 11 años. Aunque frutos de una misma estirpe, madera de un mismo tronco, de estilos distintos.
Diametralmente distintos, cabría decir sin faltar a la verdad. Cada uno vivió a su modo la pasión del periodismo. De ellos no hablaré a través de la referencia testimonial, de terceros, sino desde la visión cercana. Con uno y otro me tocó escuchar el rumor de sus pálpitos y suspensos, en etapas buenas y en momentos amargos.
Gustavo, afable, amante de los avances tecnológicos; pero, también, bohemio, accesible, conciliador. Una vez le declaró a este reportero que su sensibilidad social le venía por herencia y por vocación»,refirió José Ángel Ocanto en amplia reseña que llega hasta nuestros días cuando le corresponde al arquitecto Juan Manuel Carmona y a Carlos Eduardo Carmona «ser los capitanes de la cuarta generación».
«Doy fe de sus desvelos. Del complemento de la entrega de los dos, día tras día. EL IMPULSO, primer y único periódico que en Venezuela ha festejado 100 años, y sigue de largo en el tiempo, y en las galerías de su gloria, sin eclipse posible, no se perderá en sus manos. Ni en las de un colectivo que lo asume como uno de sus más caros patrimonios. Es nuestro sagrado deber garantizarlo. Velar porque así sea, por encima de todos los obstáculos. Esta tiranía no va a lograr lo que otras, en la cerrazón de épocas aún más tenebrosas, no pudieron.
La fecha que recuerda la caída del general Marcos Pérez Jiménez es propicia, como casi ninguna otra, para proclamar esta decisión unánime, esta vocación señera, en nombre de toda la familia de EL IMPULSO, desde Lara, tierra de promisión, un islote, pequeño pero esplendente, de libertad, en el seno de una nación que tarda demasiado, demasiado, en valorarse y rescatarse a sí misma.
Decimos, con Juan-François Revel, que, es verdad, en muchos países del mundo, infortunadamente, hay prensa sin democracia. Pero no hay democracia sin prensa».
Venezuela es, ahora, expresó con palabra contundente, un país por moldear. Ese barro, hoy incierto, ordinario, informe, dio vida a un pueblo que en el pasado ostentó demasiadas muestras de valor, de pudor, de conciencia. Ese barro, y eso es lo que nos conforta ahora, ha repudiado dar forma a cadenas, a barrotes, a las efigies de la sumisión.
EL IMPULSO espera la reflexión del Gobierno
Al finalizar la sesión especial del Concejo Municipal de Palavecino para celebrar los 110 años de fundación de EL IMPULSO, el periodista José Ángel Ocanto, quien fungió como orador de orden, indicó a los medios de comunicación al momento de ser entrevistado, que este rotativo es el primer periódico y el único en Venezuela que llega a cien años de fundado.
“Es una hazaña en cualquier época del país, y EL IMPULSO las ha sobrevivido a todas, tocándole enfrentar y registrar épocas de dictaduras, épocas muy negras, épocas esplendentes de democracia, épocas de crecimiento económico, de bienestar social, épocas de cierres, amenazas, situaciones judiciales muy terribles, y hoy, incluso constreñidos sus cuerpo por la carencia de papel, que es una cosa que niega, que exista particularmente en Venezuela la libertad de expresión”, subrayó.
Acotó que es necesario que haya un teatro de amplias facultades para poder opinar sin ningún tipo de represalias, para que los medios puedan trabajar y tener sus garantías plenas, y para que todos los ciudadanos puedan dar y recibir información, abierta, plural, en condiciones iguales para que se puedan contrastar. Fue enfático al asegurar, que EL IMPULSO se renueva pese a las trabas para adquirir papel periódico, tinta y todos los insumos necesarios para funcionar libremente.
“Hoy, este rotativo demuestra la fuerza moral impregnada por don Federico Carmona. Tenemos un personal increíble que ha salido a la calle, a exigir garantía de derecho al trabajo. Tenemos en definitiva, una historia por delante que nos empuja y nos hace sentir realmente confortados, y abrigamos la esperanza que saldremos adelante y EL IMPULSO, seguirá circulando por muchos años más y que tendremos un país en democracia y con libertad plena”, afirmó el periodista con determinación.
Al ser consultado sobre las diligencias y gestiones para adquirir la materia prima que le permita seguir circulando este rotativo, Ocanto señaló que la directiva del medio ha establecido conversaciones con todos los niveles de Gobierno, ha conversado con los responsables directos para el otorgamiento de las divisas.
“EL IMPULSO ha cumplido con todos los requisitos. No es por falta de esfuerzos, de trámites y gestiones. Por ejemplo, durante el 2013, a este rotativo no se le liquidó ni un solo dólar, ni tampoco en lo que va de este. Con todas las limitaciones, con todas las dilaciones que se han producido, EL IMPULSO sigue allí, presente, cumpliendo con su propósito sagrado: informar oportunamente y con veracidad”, resaltó.
Observó que tanto los trabajadores, como la directiva del periódico, “esperemos que el Gobierno reflexione y tenga la suficiente sensatez de reconocer que no puede bajo ningún concepto, tener sobre sí la sombra de un medio de comunicación cerrado porque le obstaculizaron sus insumos fundamentales”.
