Desde hace dos años, los directivos de la Escuela Gran Mariscal de Ayacucho habían denunciado la situación de colapso de cloacas que tiene la institución, además del deterioro que presentaba la bomba de hidroneumático que surtía al plantel.
Aunque se encargaron de llevar oficios a la Zona Educativa en varias oportunidades, las respuestas y soluciones nunca llegaron. Hasta que el día de ayer, tuvieron que suspender las actividades escolares por el colapso de la bomba de agua.
Rafael Aldana, subdirector de la escuela, destacó que desde el año pasado, la misma comunidad educativa se había encargado de reparar a medias la bomba, pero ya este dispositivo llegó a cumplir su vida útil, los técnicos aseguran que es necesaria la instalación de una nueva bomba.
“Esperamos lo más que pudimos para que los muchachos no pierdan clases. Pero ya estamos en el límite. El Estado tiene que dar soluciones a lo que está pasando, porque así no se puede dar clases, ni el personal ni los alumnos tienen donde hacer sus necesidades”.
El personal docente, administrativo y obrero acudió este jueves a cumplir horario en la Escuela Ayacucho, mientras esperan que la bomba sea sustituida o reparada.
“No queremos que los niños vengan y por la contaminación se genere una epidemia. La solución está en manos de la Zona Educativa. Queremos soluciones para que los alumnos vuelvan a las actividades regulares”.
Técnicos de la Zona Educativa acudieron la mañana de ayer para constatar la situación y llevar un informe al despacho de Xiomara Ascanio, jefa de la institución, a fin de que se agilicen los trámites para la reparación de estos equipos.
Cabe destacar que en esta escuela hacen vida 497 estudiantes y 32 profesores entre especialistas y docentes de aula.
De no recibir algún tipo de respuestas, para el día lunes tomarán con representantes y alumnos la escuela, para hacer ver a la colectividad, los problemas por los cuales no se realizan las actividades escolares en el plantel y así presionar a los representantes de la Zona Educativa, Alcaldía, Gobernación o Corpolara, para que les tiendan una mano de ayuda y así poder solventar esta problemática.
Otros problemas
Aunque el colapso de la bomba de agua es el problema más crítico, también esta escuela padece de diversas deficiencias, entre ellas el deterioro de la infraestructura que no recibe mantenimiento desde hace ya varios años, friso e impermeabilización, además de necesidad de pupitres y constantes fallas de electricidad debido a la caída de tensión que sufren por la sobre carga de energía.
Asimismo, durante las elecciones del pasado mes de diciembre, en la escuela les desconectaron el servicio de internet, con el cual los alumnos podían realizar sus investigaciones y hasta la fecha no ha sido restituido, por ende el Centro Bolivariano de Internet y Comunicaciones que funcionaba en la escuela, se ha mantenido cerrado.