Amparados en el artículo 60 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, el cual se refiere a los derechos civiles de los ciudadanos en relación a la protección por parte del Estado, familiares, amigos y la representante legal de Luis Fernando Mendoza Suárez, de 18 años, asesinado la noche del jueves 16 de enero del año en curso, hicieron su derecho a réplica, por la publicación hecha en EL IMPULSO, el sábado 18, donde según fuentes policiales, el joven estaba inmiscuido en problemas de adicción.
Desmintieron tal aseveración e informaron que el joven era asistente de la iglesia Juan 3:16 en Río Claro, población donde le quitaron la vida de un tiro en la espalda cuando se trasladaba en una motocicleta junto a un primo y un niño de 10 años de edad.
Yudith Suárez, tía de la víctima, Julio Pastor Palmera, Gregorio Parra, Pastor de la Iglesia y Marlene García representante legal, arribaron a nuestra sede y con 640 firmas de la comunidad, en manos, al igual que la constancia de buena conducta del consejo comunal de El Cementerio y rúbricas de la Unidad Educativa 540, donde estudió el hoy occiso, desmintieron la información de que era adicto a sustancias sicotrópicas y estupefacientes.
Aseguraron que se trataba de un buen joven, trabajador y de buena conducta.