Los diarios venezolanos están inquietos ante la falta de papel en las rotativas, que atribuyen en parte a las distorsiones del control de cambio y en parte a una estrategia del Gobierno para “asfixiar” a los diarios de tendencia opositora. “En 60 días nadie tiene papel si el gobierno no resuelve esto”, aseguró este jueves Miguel Henrique Otero, presidente-editor de El Nacional.
“La última vez que nos aprobaron dólares fue en mayo del año pasado”, aseguró Otero en una reunión con corresponsales extranjeros en Caracas. Su periódico, uno de los de mayor tradición del país, con unos 80.000 ejemplares diarios, se ha visto obligado a dejar de imprimir algunas secciones y publicarlas sólo en su versión de internet.
Cabe recordar que primero es preciso la aprobación a la tasa oficial de 6,30 bolívares, tras un engorroso proceso burocrático que culmina con la emisión de dos certificados: uno que determina que califican para recibir dólares y otro que autoriza la liquidación de esos dólares. Después hay que esperar que llegue el material por barco, un proceso que puede alargarse hasta casi dos meses.
La misma situación que El Nacional viven otros grandes diarios de tirada nacional, como El Universal, que no recibe divisas desde septiembre, y de otras regiones, como El Correo del Caroní (estado Bolívar) o EL IMPULSO que ya recibió la autorización para importar.
Hace unos meses, en otra severa crisis de abastecimiento de papel, varios periódicos pequeños dejaron de salir temporalmente o se vieron obligados a reducir su número de páginas.
“Hay un tema de desorden con las divisas, con un sistema que no es viable. El gobierno está entrampado en su modelo”, asegura Otero.
“Algunos de esos diarios regionales son absolutamente imprescindibles. Sus ciudadanos establecen una relación de identidad con el diario.
Si esto no se resuelve y estos diarios dejan de salir, tendría un impacto político en contra del gobierno”, asegura Carlos Correa, director de la ONG Espacio Público, que trabaja en temas de libertad de expresión.
“Asfixiar” a los incómodos
Varios medios afectados y ONGs atribuyen la dificultad para adquirir papel a una estrategia del gobierno para “asfixiar” a los diarios críticos con su gestión.
“Como a la prensa escrita no la pueden silenciar, es coherente pensar que ellos busquen mecanismos para que no imprimamos más o imprimamos menos. Y una manera es el papel”, declara Otero.
“Pareciera que es una política deliberada para asfixiar a algunos medios con posiciones críticas”, subraya a la AFP Carlos Correa, director de la ONG Espacio Público.
Sin embargo, periódicos afines al oficialismo, como el diario VEA, también presentan problemas para abastecerse.
“Nosotros tenemos papel para un mes, pero no es porque el gobierno no nos haya aprobado los dólares, sino porque se demora mucho en llegar”, explica a la AFP Mercedes Ortuño, jefa de información. La AFP solicitó una reacción al Ministerio de Comunicación, pero no obtuvo respuesta.
Sin embargo, el ministerio envió un comunicado en el que, citando una investigación del diputado Julio Chávez, del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), asegura que varios grandes diarios revendían en el mercado negro “el papel prensa importado con dólares oficiales”.
EL IMPULSO hace esfuerzos
Carlos Eduardo Carmona, presidente de la CA EL IMPULSO, sostuvo que la empresa, luego de la aprobación del permiso de importación, hace esfuerzos por lograr papel mientras llega el cargamento.
Cabe recordar que si bien Cadivi aprobó el permiso de importación, el barco en el cual se esperaba transportar el pedido partió el viernes pasado y ahora es preciso esperar un nuevo embarque.
José Ángel Ocanto, jefe de Redacción de esta casa editorial, afirmó que en conversación telefónica con José Khan, hasta el miércoles presidente de Cadivi y ahora ministro del Poder Popular para el Comercio, el funcionario envió un saludo a los trabajadores de esta casa editorial, quienes dieron la batalla por lograr la aprobación, unidos como una gran familia.
Chávez quiere dialogar
El diputado Julio Chávez, durante entrevista en VTV la noche de este jueves, manifestó estar dispuesto a conversar con el presidente de EL IMPULSO y dijo que no hay intención de cercenar las libertades ni de llevar al cierre a los medios.