En la mañana de este miércoles, el reclamo de un grupo de trabajadores del diario EL IMPULSO retumbó en las calles del centro Barquisimeto para exigir respeto a su derecho al trabajo, en el marco de la crisis que se vive en este medio de comunicación ante la falta de papel periódico y otros insumos.
La manifestación se llevó horas antes de que trascendiera la información sobre la aprobación de los dólares por parte de la Comisión de Administración de Divisas (Cadivi) solicitados desde el año pasado por esta casa editorial, pero que al realizarse a destiempo generó un retraso con el proveedor internacional que impidió concretar la transacción y obliga a una nueva solicitud y trámites ante la autoridad en materia cambiaria.
Aunque en principio se anunció una concentración a las puertas de la Inspectoría del Trabajo Francisco Tamayo, en la carrera 21 entre calles 23 y 24, el ímpetu de los manifestantes convirtió la protesta en una marcha que pasó frente a la sede de la Defensoría del Pueblo del estado Lara y llegó hasta la sede del Consejo Legislativo del estado Lara, en la calle 23 entre carreras 17 y 18.
Allí los trabajadores de EL IMPULSO fueron recibidos por los diputados de la fracción opositora Filiberto Peña, Grace Lucena, Roberto Sánchez, Sagrario Pérez y Leonardo Torres, a la entrada del parlamento.
Una comisión de los manifestantes subió hasta el cuarto piso del Palacio Legislativo, donde se reunieron con el diputado Luis Jonás Reyes, presidente del CLEL; Luis Contreras, vicepresidente, además de los parlamentarios opositores.
Los trabajadores destacaron la receptividad por parte de las autoridades del parlamento regional, a quienes en principio se les explicó la delicada situación que atraviesa el periódico, además de la falta de respuesta que hasta ese momento no se tenía sobre la aprobación de las divisas y las formas en que el periódico podría mantenerse a flote con una respuesta positiva por parte de Cadivi.
La comisión de EL IMPULSO estuvo conformada por Gisela Carmona, gerente de Producción y Mercadeo; Agustín Iglesias, gerente de Sistemas; Gisela Schlaffer, gerente de Administración; Haydeluz Cardozo, coordinadora de Redacción y la periodista Alba Arráez.
Cardozo indicó que a los parlamentarios se les habló sobre el papel que ha tenido este rotativo al momento en que se ha informado sobre la gestión de gobierno y las propuestas para el estado Lara, así como la repercusión que tendría en Lara el cierre de un medio de comunicación con más de un siglo de historia en la región.
Los parlamentarios solicitaron mayor información sobre la situación operativa del diario y las especificaciones técnicas de las bobinas de papel periódico, las cuales fueron explicadas por los gerentes, así como el motivo de la solicitud de divisas para importación.
Reyes manifestó a los trabajadores su intención de colaborar para buscar una pronta salida a la situación, incluso se comprometió a comunicarse con el diputado Julio Chávez a los fines de conocer cuáles gestiones ha adelantado la Comisión de Medios y Poder Popular de la Asamblea Nacional, además que el Consejo Legislativo pueda servir como enlace para interceder tomando en cuenta la crisis.
Empleos en peligro
Durante la concentración en la Inspectoría del Trabajo, fue extendida una comunicación escrita en la cual se exigía una garantía de respeto al derecho al trabajo. Se espera que la misiva sea respondida lo más pronto posible por el representante del Ministerio del Trabajo en la región.
“Nos dirigimos a esta institución, como garante del derecho al trabajo, para que intercedan a favor de la preservación de nuestros empleos, ya que consideramos que en el proceso de liquidación de Cadivi se han dilatado los tiempos sin dar una explicación”, reza el comunicado entregado ayer en la mañana.
Violeta Villar Liste, jefa de Información, señaló que el cierre de las puertas de EL IMPULSO significaría cercenar el derecho al trabajo de cerca de trescientos trabajadores y sus familias, tanto de quienes tienen seis meses al servicio de esta casa editorial como de quienes cuya trayectoria laboral alcanza los cuarenta años.
“No solamente son los periodistas, son las secretarias, los prensistas, los vendedores, y toda una red de distribuidores que dependen de este diario para sobrevivir”, dijo.
Explicó que el objetivo de la carta entregada es aclarar que el motivo de las manifestaciones es un problema eminentemente laboral y no político.
La importancia que ha tenido la denuncia sobre la crítica situación de EL IMPULSO también fue resaltada por Villar Liste, quien refirió que se trata de una preocupación internacional por tratarse del periódico más antiguo de Venezuela. “Cuando se cierra un periódico se cierra una ventana de libertad”.
La lucha es por un derecho ciudadano
Nancy Rodríguez, integrante de la Red de Instituciones Larenses, apoyó las acciones de los trabajadores y destacó el valor de EL IMPULSO como una institución de los larenses “no sólo por sus 110 años de vida sino por su trabajo para la sociedad civil”.
El respeto al derecho de los ciudadanos a estar informados es otro motivo de Rodríguez para apoyar la existencia de un medio de comunicación caracterizado por la entrega de una información veraz, oportuna y de calidad.
“Los ciudadanos debemos luchar por un derecho que nos da la Constitución, derecho humano y debemos hacer todo lo que está en nuestras manos para preservarlo”.
