Un joven tenía, prácticamente, un día extraviado. Los familiares fueron arropados por la angustia y decidieron buscarlo. Luego de varias horas, lo hallaron tiroteado y con signos de quemaduras en parte de su cuerpo.
El joven, Anderson Aron Guédez Cuicas, de 18 años, llegó a visitar a sus parientes, como siempre lo hacía; el pasado día martes en horas de la mañana, en el sector La Constituyente de Retén Abajo, al norte de la ciudad.
Guédez, compartía de lo más normal pero a la 1:30 de la tarde, decidió acudir hasta donde se encontraba su papá trabajando como albañil.
Desde ese momento, los familiares del joven édez, no supieron más nada de él.
El día de ayer, culminando la mañana, todos los parientes y conocidos iniciaron una búsqueda por el sector y sus adyacencias.
Luego de las 2:00 de la tarde, lo hallaron en una zona baldía lleno de ramas secas, piedras y tierra de La Constituyente; a varios metros de la quebrada.
El cuerpo del joven Guédez estaba sin vida, con múltiples heridas por arma de fuego en la cabeza y con quemaduras desde la cintura hasta la altura de su hombro izquierdo. Vestía una franela de rayas de color blanco y negro, pantalones de color guayaba y chancletas marrones.
En su cuello se le apreció una cadena, en la muñeca derecha una pulsera negra y en su dedo meñique, de la mano derecha, un anillo.
Cerca del cuerpo de Guédez, había un bolso de niña y cuando llegaron los funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) para realizar las pesquisas, solo contenía tierra y maleza.
La tía del hoy occiso, Marbella Guédez, afligida expresó que su sobrino siempre se mantenía comunicado con sus familiares y era muy querido por todos. También dijo que residía en San Lorenzo con un amigo, aunque otros parientes en la morgue del Hospital Central comentaron que, actualmente, estaba viviendo por el sector de Tamaca y laboraba con el papá, algunas veces, como ayudante de albañilería.