Justo en la entrada del Colegio de Médicos, la basura se muestra como una gran montaña de desechos, que han pasado días a la intemperie y los malos olores ya comienzan a incomodar a los peatones que transitan por este espacio, mientras que a lo largo de la avenida Vargas los desperdicios adornan las aceras y calles.
La falta de limpieza y mantenimiento se observa a lo largo de esta concurrida vía, lo cual evidencia el descuido de la ciudad en la que se ha olvidado el barrido, la recolección de basura y desechos desde hace ya varias semanas.
Carmen Agüero, una de las ciudadanas que esperaba el transporte público justo frente al Centro comercial Arca, expresó su indignación al ver la decadencia en la cual está sumida la ciudad y en especial la Avenida Vargas.
“Las calles están muy sucias y los malos olores que salen de la basura hacen que sea imposible esperar el transporte de forma tranquila. Parece que la hediondez se le pega a uno en la ropa”, comentó con una de sus manos tapándose la nariz.
Muchos de estos desechos llevan semanas en la vía y los animales han hecho de las suyas rompiendo las bolsas y regando papeles y comida en las aceras.
La nueva gestión municipal tiene mucho trabajo por hacer, para enmendar el olvido en el cual dejaron a la capital larense. Según informaciones de Imaubar, en lo que va de gestión han recolectado más de 300 toneladas de desperdicios en diversas zonas de Iribarren y continuarán los operativos de limpieza y recolección para lograr ofrecer la ciudad limpia que todos los barquisimetanos esperan ver en la “Ciudad Ideal” prometida.