Dictamen
No hay precedente de tanto descaro e irresponsabilidad. La situación actual de la alcaldía de Iribarren es quizá la obra más criminal del PSUV en nuestra entidad. No solo se trata de una situación de abandono injustificado, sino también de desmanes descomunales que afectan el patrimonio de todos los barquisimetanos. La alcaldesa saliente vino a Barquisimeto solo a votar y se volvió a ir a Caracas sin acercarse siquiera por su despacho. El alcalde encargado no aparece por ningún lado y las dependencias están en manos de personas temporales que dejaron solo para la entrega mientras que muchos de los directores reales se jubilaron o migraron a otros cargos para burlar la libre remoción.
Por su parte los concejales salientes se despidieron despojando a la municipalidad de dos entes descentralizados y los electos por el PSUV no han querido instalar la nueva Cámara dentro del lapso correspondiente, retrasando así la juramentación de Alfredo Ramos. Mercabar sigue en jaque por parte del Gobierno Central que con la excusa de la “guerra económica” tiene militarizada esa empresa municipal. La irresponsable de Amalia no colocó ni los adornos navideños y su gestión solo nos dejó huecos y basura regada. Lo único que hicieron en estas últimas semanas de gestión fue sacarse prestaciones y jubilaciones, al tiempo que crearon nóminas fantasmas con contrataciones oscuras de última hora.
Este es el desastre que nos encontramos, algo solo posible dentro de este secuestro institucional en el que un partido político está por encima del Estado creyendo que el poder es eterno. Pero del tamaño del reto será también el tamaño del empeño y el esfuerzo que Alfredo Ramos y su equipo pongan al cambio en Iribarren en pro de una Ciudad Ideal para todos. Todas las fechorías serán denunciadas debidamente con una auditoría que se hará dentro del plazo reglamentario para que la opinión pública conozca lo que pasó en este período y para que se establezcan responsabilidades conforme a derecho.
Pero nuestra prioridad no será el debate político ni mucho menos partidista, tampoco vamos a esconder nuestra responsabilidad en la persecución política de la cual ya estamos cansados. El reto es hacer gestión, cambiar realidades, cambiarle el rostro a la ciudad. Para eso contamos con un equipo de primera línea y el concurso de las fuerzas políticas que integran la MUD. Mi responsabilidad será la de coordinar el trabajo de gente talentosa en beneficio de los barquisimetanos para materializar el programa de gobierno de la Ciudad Ideal que lidera Alfredo Ramos, quien seguirá en contacto directo y permanente con las comunidades y los sectores representativos de la sociedad civil como son las iglesias, las universidades, los gremios, los sindicatos y las cámaras productivas.
Vamos a recuperar el tiempo perdido y a reconstruir a Barquisimeto que vive su peor momento luego del saqueo del PSUV. Trabajaremos concertadamente con la Gobernación y sobretodo con la gente que está deseosa de ayudar en todas las áreas. La ciudad necesita del concurso y cariño de todos. Con Alfredo, comenzó el cambio.
Caso cerrado, el dictamen final lo tiene usted.
José Ignacio Guédez
Twitter: @chatoguedez
