El país entero sin distingo de ideología política, está exigiendo al Gobierno nacional que deje en libertad a los presos políticos, sobre todo al ex comisario Iván Simonovis, quien se encuentra en un delicado estado de salud.
Dicho pronunciamiento fue realizado por el diputado de la Asamblea Nacional por el estado Táchira, Miguel Ángel Rodríguez, quien pidió a las autoridades realizar un gesto de paz y reconciliación.
«Es impresentable la crueldad de que pase otro día sin que se dicte la medida humanitaria a Iván Simonovis y se preparen más decisiones que favorezcan a los presos políticos del país. Tanto será, que jefes de instituciones del Estado y fuertes aliados del Gobierno nacional así lo sugieren públicamente. Definir esta situación y acabar con el chantaje político sobre los líderes de oposición en general, pero sobre todo los recién electos, es lo que corresponde hacer al jefe del gobierno Nicolás Maduro, de inmediato y por su propio bien», afirmó.
Explicó que el llamado lo hace a propósito de las apreciaciones del Ministerio Público sobre la amnistía que puede decidir el Presidente de la República y las que en su programa ha reiterado el ex vicepresidente José Vicente Rangel sobre el comisario Iván Simonovis, que se suman al concierto de procuras de medidas humanitarias dentro y fuera de Venezuela.
Rodríguez recuerda ser uno de los firmantes de la Ley de Amnistía que se presentó a la Asamblea Nacional en 2011 y considera «criminal» seguir respondiendo con silencio o con calumnias de cualquier tipo, las peticiones de medidas humanitarias y de reconsideración de sus condiciones, tanto al ex director de seguridad ciudadana de la Alcaldía Metropolitana, como a las demás personas que quedaron condenadas luego de «tan viciados procesos judiciales».
«Ha pasado más de una década. Debe solucionarse su situación», dijo.
Respeto democrático
Por otra parte, el parlamentario considera que todo el país seguramente ponderaría como positivo que Nicolás Maduro se reúna con todos los alcaldes electos, pero que además exhiba «muestras de respeto democrático» a quienes luchan desde las filas de la oposición por un cambio político en el país y a quienes por esa misma lucha acaban de ser electos alcaldes y concejales.
Asimismo criticó la serie de «despojos, de activos y facultades, que ha decidido el Gobierno contra las localidades ganadas por la unidad democrática, y la instalación de administraciones paralelas que bajo el título de protectores, realmente son guerrillas contra la voluntad popular».
Afirmó que no puede haber más condicionamiento que el respeto a las exigencias que a gobernadores, alcaldes y concejales, pero también al jefe del gobierno nacional, hace la carta magna.
«Aquí el diálogo político no puede darse sólo si a uno u otro actor se le tuviera que consentir tanto el ego como su propuesta. Eso es autoritarismo, eso es totalitarismo, y eso lo debería entender el propio Nicolás Maduro».