Que el alma de Mandela ilumine a nuestros gobernantes. Difícil, pero los milagros existen.
Se ha cumplido otro proceso electoral, creo que con este van 19 desde que el teniente coronel felón, hoy difunto, asumió el poder. Mejor ejemplo de país democrático, imposible. Si Luis. Como siempre el comportamiento ejemplar de nuestro pueblo. Claro con la excepción de los colectivos motorizados armados que dan vueltas por los centros de votación amedrentando a los votantes no rojos, con la condescendencia cómplice de los miembros del Plan República, y el abuso descarado de los altos funcionarios públicos, incluido el enchufado mayor, y de todos los medios de comunicación del Estado, encabezados por la televisora que pagamos todos los venezolanos pero que le sirve única y exclusivamente al partido del gobierno. Pero con todo eso la jornada transcurrió sin mayores contratiempos. Claro que en la medida que se aproximaban las 6 de la tarde, hora de cierre de mesas, los batallones se desesperan y en esta oportunidad vimos a Diosdado encadenarse diciendo sandeces lo que nos hizo saber que las cosas, para ellos, estaba medio peludas. Pero se lograron cerrar las mesas y transmitir los resultados al centro de cómputo.
En esta ocasión el CNE casi que cumple a la perfección lo prometido en cuanto a la hora del primer boletín. A las 10 p.m. en cadena nacional, la flamante rectora presidenta da el primer boletín. Para edulcorar los resultados y no molestar a sus jefes, comenzó a dar cómputos de votos nacionales que nada tenían que ver con el proceso municipal. La careta al suelo definitivamente. Como no pueden cambiar los resultados numéricos, yo insisto que el proceso electrónico es confiable, cambian la forma de presentarlos. Así son las cosas en esta revolución castro comunista. Luego empezó el palo de agua. La tierra del comandante eterno y supremo, Barinas, y en el día de la lealtad, para la MUD; Barquisimeto para la MUD, San Cristóbal, para la MUD; Mérida, para la MUD; Valera, para la MUD; Valencia para la MUD, Maturín, para la MUD; Maracaibo, para la MUD, La Asunción, para la MUD; la Alcaldía Mayor, para la MUD. “Bueno mija y nosotros qué”, chilló un vocero gubernamental rojo rojito. San Carlos, Maglio Ordóñez, Rodríguez, Garcés y unos cuantos pueblitos más, fue la respuesta. No bien concluida la cadena de Tiby, arrancó Nicolás. Ganamos, ganó la revolución, el socialismo, el legado de mi comandante. Sopotocientas alcaldías, requetesopotocientos votos. Pero se lamentó de perder Barinas y Maturín, cómo es posible eso, traidores, apátridas, mal agradecidos. Y dígame eso el vampiro otra vez. Y el maderero. Y la Rosales. Fin de mundo. Rafael, ¿cuánto nos costó cada voto? Una boloña importada.
Calmado los ánimos la verdadera cuenta es que la MUD y sus aliados y los no chavistas sacaron casi 5.300.000 votos, el 51% y los chavistas, polo patriótico incluido, menos de 5.200.000 votos, el 49%. Esas son las matemáticas electorales del 8D, no hay otra. Claro que sí ganaron más alcaldías, pero el principal eje urbano, industrial y comercial se lo llevó la MUD. El lomito pues. Pero sabrán leer estos resultados Nicolás, Diosdado y sus asesores. Lo dudo. El discurso sigue igualito. Violento, amenazante, grosero. Premios de consolación a los perdedores. Protectores de ciudades y estados. Reuniones sólo con los rojos rojitos. Sigue el desastre. No entiende que el país se dividió en dos toletes. Uno que no quiere el castro comunismo, que lo rechaza y otro que no sabe para dónde lo llevan pero se conforma comprando plasmas y neveras, recibiendo migajas y otro grupito llenándose. La patria sigue pero sin harina, café, leche, azúcar, aceite, pollos. Y colas y más colas. Y viene el 2014 y no hay inventarios. Mucha plata inorgánica. Devaluación tras la oreja, inflación galopante y ahora la gasolina. Sin riesgo de Caracazo, por ahora, ya que los del Caracazo están en el gobierno. Panorama bien oscuro. La MUD por su parte debe cerrar filas. La unión dio resultados. Los alcaldes democráticos deben unirse en una asociación. Elaborar planes conjuntos, exigir y pelar por sus derechos y sus churupos, sin miedo. Y trabajar duro, sin descanso. Este gobierno tiene plomo en el ala. Y pies de barro. Felicitaciones a todos los ganadores, de ambos lados.