Celebrando que perdí

Es un caso insólito, específicamente no es mi situación, pero particularmente me parece algo inusual que a sabiendas que perdieron celebren y digan que ganaron.
Esto más o menos fue lo que pasó en las recientes elecciones del 8D, el grupo “grande” o “la mayoría”, del pueblo no votó por el gobierno de turno en las ciudades más importantes de Venezuela, sin embargo reconociendo el reverso dicen que ellos ganaron, algo totalmente absurdo, ya que la única manera verdadera de ganar es que le jugaron a los dos bandos, es decir, son los propios y originales guabinosos.
Saquemos cuenta, perdieron en las alcaldías capitales de los Estados: Zulia, Barinas, Lara, Carabobo, Nueva Esparta, Táchira, Mérida y Distrito Metropolitano de Caracas… y salen con la cara bien lavada a decir que ganaron.
No señores ustedes perdieron hasta la familia, tanto de Barinas como la que tenían en el municipio Baruta-Estado Miranda (en este último apenas lograron el 19,28%). De igual modo perdieron la pelota de beisbol y de paso los robaron en la escuela, ya que por lo que veo solo saben sumar 2+2 = 4, y por eso les parece que ganaron. En volumen ganaron, pero no saben si el vaso que contiene agua hasta la mitad, quedó medianamente lleno o medianamente vacio.
Yo como una ciudadana común que sé un poquito de estadística y de lógica, entiendo claramente que ellos “más nunca volverán”. Por ejemplo aquí en Lara, mi estado natal, ellos estuvieron –érase una vez-, pero muy segura que más nunca volverán, o mejor dicho, podemos utilizar una palabra más acorde con el órgano rector, algo así como ”irreversible”, es decir en Lara serán irreversible los resultados tanto para reyes como para príncipes.
Además también perdieron moralmente y solo les queda hacer chistes de su caída. En una sola cosa estoy de acuerdo con el presidente de todos los venezolanos, que señaló que algunos tienen que irse, el propuso irónicamente que se vayan para Tijuana-México, yo les recomendaría que se vayan para la Antártida  (lugar más remoto de la tierra), sobretodo los militares que perdieron, ya que allá hay interesantes bases militares donde podrían trabajar.
Bueno, yo sí voy a celebrar, por el progreso de mi estado y del país, me quedaré aquí en Venezuela comiendo dulce de higo, hasta las próximas elecciones…