A las puertas de la estación policial de Cubiro, en el municipio Jiménez, se reunió un nutrido grupo de personas para presenciar el último adiós que las autoridades de la Policía del estado Lara dieron al oficial Enny José Lovera, quien fue promovido post mortem a supervisor jefe del cuerpo de seguridad.
Asimismo, al efectivo policial, asesinado el martes durante un tiroteo en sector El Yabito del municipio Jiménez, le fue concedida la condecoración Cruz de la Fuerza Armada Policial de Lara, en su primera clase, máximo galardón que pueden recibir los oficial del cuerpo de seguridad de la región.
Lovera se desempeñaba como supervisor agregado del Centro de Coordinación Policial de Jiménez al momento de enfrentar a tres sujetos armados que se resistieron a la voz de alto. En el intercambio de disparos también resultaron heridos otros tres efectivos policiales.
“Es un símbolo de la institución policial, que le entregamos quienes lo apreciamos y quisimos como un hermano, ya que todos los policías somos una familia por todo lo que compartimos a diario”, expresó Miguel Rojas, subdirector de Polilara al entregar los reconocimientos.
A pesar del profundo dolor generado por la pérdida de Lovera entre sus familiares y amigos, el directivo solicitó un aplauso para celebrar los logros en vida del homenajeado.
La condecoración y la promoción de Lovera fueron emitidas por resolución interna de la Fuerza Armada Policial. Fue recibida por los familiares del oficial caído.
“Todos los oficiales de policía tenemos como aspiración ascender de rango en la fuerza hasta llegar a lo más alto, por eso le damos a nuestro compañero este rango inmediato que le correspondía. Estamos seguros de que esto lo está viendo desde el cielo”, agregó Rojas.
Luego del acto, los presentes se trasladaron a la iglesia San Miguel Arcángel para los actos religiosos, y de allí acompañaron al oficial caído hasta el cementerio de Cubiro, donde fue depositado su cuerpo.
Lovera es el oficial número 17 de Polilara que es asesinado durante el año 2013.