¿Qué va ocurrir en Venezuela? El primer escenario es el económico, el cual no es nada alentador, se seguirá complicando mucho más, pues el gobierno insiste en implementar (incluso vía habilitante) un modelo basado en diversos medios de producción supeditando el privado, siendo éste último el que históricamente ha impulsado el desarrollo de las naciones que hoy ostentan alta calidad de vida de la mano de instituciones estatales férreas, apegadas a la ley. En estos casi 15 años de gestión “revolucionaria” es en lo económico donde se encuentra la mayor deuda, la ilación de políticas erradas han sumergido al país en un “importativismo” donde alrededor del 80% de lo que consumimos es traído desde fuera.
Así pues, existe hambre desmesurada por las divisas internacionales a fin de saciar la demanda interna de productos, divisas que ven como única fuente generadora la actividad petrolera, misma que resulta insuficiente. A menos que se corrija el rumbo con un “golpe de timón” de 180° y se decida apoyar la actividad productiva nacional en todos sus espectros, el panorama económico tenderá a empeorar, obligándose a quienes tengan que importar hacerlo con el elevadísimo precio del dólar paralelo, lo que redunda en más y más inflación, cierre de empresas, mayor carencia de empleo formales.
En lo político el gobierno cerrará filas, radicalizará su postura ante su vertiginosa pérdida de popularidad, buscará por todos los medios doblegar sus oponentes, así como a los medios de comunicación social que tengan a bien informar sobre los aspectos negativos de la gestión roja, como lo son inseguridad, protestas, escasez y alto costo de la vida. Ha tomado el estandarte de la lucha contra la corrupción lo cual es sospechoso, por cuanto es el Psuv quien controla más del 80% de todo el espectro público, por tal motivo hay quienes piensan que dicha lucha es una treta para ir contra cabezas visibles opositoras ante el temor certero que ante la coyuntura vigente alcen vuelo sus niveles de aceptación, sea cual sea la razón seguramente el panorama político estará muy lejos de navegar en aguas calmas, la tempestad seguirá tomando la batuta.
En lo social ¿cómo podría ser distinto? La sociedad seguirá siendo víctima de una política-show, donde lo realmente importante es rezagado a la diatriba política, al espectáculo, a la amaestrada exacerbación de consignas políticas totalmente divorciadas de la realidad. Ese es el país que tendremos en el futuro inmediato, nada distinto ¡al país que merecemos!
@leandrotango