A las ocho de la mañana de este sábado, los devotos, religiosos y muchos niños, se congregaron frente al templo de Altagracia, ubicada en la calle 20 entre carrera 19 y avenida 20, para celebrar junto a la Virgen Divina Pastora, el cierre del Año de la Fe, con una caminata a través de siete iglesias para culminar en la Catedral Metropolitana de Barquisimeto.
El periplo de la fe
En la parroquia Nuestra Señora de Altagracia, primer templo del periplo mariano, la muchedumbre esperó frente a la iglesia a puerta cerradas, símbolo de invitación al recogimiento.
Minutos más tarde y luego de las palabras de bienvenida del padre Gustavo Pérez, vicario episcopal para la Pastoral de Arquidiócesis, se abrieron solemnemente las puertas y con repique de campanas, se inició la procesión de entrada con majestuoso orden: los ciriales, la cruz, el Cirio Pascual, seminaristas, diáconos, sacerdotes y los feligreses.
De allí, junto a la imagen sagrada de la Divina Pastora, en caminata acompañada de oraciones y cánticos, la procesión marchó hasta el templo de San Francisco, antigua Catedral de Barquisimeto.
Después de la lectura que no duró más de diez minutos dentro de esta majestuosa iglesia, efectuaron el canto Milagro de Amor, para salir con dirección a la iglesia Inmaculada Concepción, seguido el Santuario de La Paz.
Celebrada la lectura de Timoteo 1,6 “Por tal motivo te recomiendo que reavives el carisma de Dios que está en ti por la imposición de mis manos”, en canto de Espíritu Santo, partió la Pastora de Almas, hasta la parroquia La Milagrosa, a donde llegó a las once de la mañana.
De La Milagrosa, la procesión se encaminó hasta la Basílica El Cristo y posterior hasta la Catedral, a donde arribó pasadas las doce del mediodía.
7 templos, 7 sacramentos
El presbítero Gustavo Pérez, explicó que la significativa caminata se realizó para celebrar la clausura del Año de la Fe, decretadas por el papa emérito Benedicto XVI en el 2012.
Acotó que para la caminata escogieron como lema Siete templos, siete sacramentos, “porque los siete templos representan la universalidad de la iglesia católica y la Arquidiócesis, más los siete sacramentos representan los peldaños que a lo largo de la vida nos ayudan al crecimiento de la fe.