La Federación de Colegios de Contadores Públicos de Venezuela (FCCPV), hizo sus propuestas en el recientemente finalizado DNA (Directorio Nacional Ampliado) confiando en el consenso en la cohesión de fuerzas y en el diálogo para lograr mejores escenarios económicos y financieros para Venezuela en el año 2014.
Apelando a las competencias técnicas del gremio, Diego Mendoza, presidente de la Federación de Colegios de Contadores Públicos de Venezuela, destacó en las conclusiones del DNA realizado en la ciudad de Mérida, tres propuestas que fueron discutidas por la plenaria. La primera se refiere a la celebración por parte del Gobierno de contratos de cumplimiento, donde la Federación propone el instrumento de la certificación de deuda en moneda extranjera, que permitiría tener constancia de las deudas contraídas por empresas venezolanas con el exterior y tener información sobre las condiciones de contratación de esa deuda.
Por otra parte, plantearon la necesidad de que el organismo competente gubernamental presente el estado de flujo de divisas, lo que permitiría de manera directa determinar el origen y las aplicaciones de las divisas asignadas a la empresa. Facilitaría los procesos de auditoría y el buen uso de estos recursos. “De esta manera estaríamos cumpliendo nuestro compromiso técnico de coadyuvar a las mejores políticas públicas del país y en consecuencia a una mejor distribución de los recursos”, agregó Mendoza.
Además se expresó sobre la función del comisario, contralor que conoce los estados financieros de la empresa constituida y que su figura está contemplada en el Código de Comercio. Además tiene las más amplias potestades y entre sus responsabilidades contempla el desempeño administrativo, financiero y las observaciones u objeciones que se puedan tener sobre los directivos de las empresas.
En cuanto al tema de la escasez, Mendoza planteó como estrategia de solución, el fortalecimiento de la producción. “Por eso estimulamos el mayor nivel de diálogo y de encuentro para generar políticas que estimulen el emprendimiento nacional”, sostuvo el gremialista.
Asimismo, se sugirió la creación de la Superintendencia de Sociedades, órgano que permitiría adelantarse a los procesos de quiebra de las empresas, estimular las mejores prácticas empresariales y facilitaría el acceso a la información financiera para todos los venezolanos, pero también para el Estado hacia la información requerida para su planificación de políticas públicas y la planificación de sus presupuestos.
Para la Federación de Colegios de Contadores Públicos de Venezuela “el mejor negocio es invertir en Venezuela” y va a propiciar generar un nuevo marco de condiciones para la producción nacional.
Por esto sostienen que el modelo empresarial venezolano debe estar signado por varios elementos: “una empresa formada e informada, que sustituye su modelo empírico de dirección por una empresa que avanza en un modelo estratégico”; que hace planificación de costos, financiera y fiscal, que le generará los rendimientos que se logre con este esfuerzo formal.
Diego Mendoza como vocero, considera necesario revisar los tiempos de devolución de los impuestos a las exportaciones, para que el empresario venezolano que se empeña en producir y en exportar tenga evidentemente el beneficio oportuno de la devolución de los impuestos que hoy están consagrados en la ley, para así avanzar en una economía de base nacional con compromiso de exportación.
Mendoza hizo énfasis en que “todos necesitamos que nos vaya bien. La empresa necesita que a la sociedad le vaya bien y la sociedad necesita que a la empresa le vaya bien.
La sociedad necesita que el gobierno lo haga bien y el gobierno necesita prosperidad en la sociedad. Entonces digamos que es un compromiso nacional y es lo que este gremio defiende”.
