Con voz propia – Golpe apuntaló poder militar

Sesenta y cinco años se conmemoran este 24 de noviembre de la asonada militar  que derrocó al Gobierno constitucional de Rómulo Gallegos (RG), primer mandatario  electo en el siglo XX mediante votación universal, directa y secreta, que sólo alcanzó a ejercer 280 días (nueve meses y nueve días). Una Junta de tres tenientes coroneles Carlos Delgado-Chalbaud, quien la presidio; Marcos Pérez Jiménez; y Luís Felipe LLovera Páez.
De confianza y al servicio del gobierno del ilustre novelista, eran dichos militares, comenzando por quien usurparía el cargo. Además de ministro de la Defensa, le había alojado en su casa en el exilio de Barcelona de España. Lo considera “su hijo putativo y le profesaba un cariño sin límites”, según testimonio de Eligio Anzola Anzola, quien fuera su ministro de Relaciones Interiores.
Los castrense venían de llevar al partido Acción Democrática a Junta Revolucionaria de gobierno, que se formó después del derrocamiento del democrático general Isaías Medina Angarita (IMA). Dicha Junta la presidió Rómulo Betancourt y de ella formaron parte los líderes Luis Beltrán Prieto Figueroa, Raúl Leoni y Gonzalo Barrios. Los insurrectos militares Delgado-Chalbaud y Pérez Jiménez, fungieron como miembros de la Junta y  ministro  de la Defensa el primero; y Jefe de Sección del Estado Mayor del Ejército, el segundo. De allí que se le denominara contragolpe, en relación con el 18 de octubre de 1945.
Entre quienes suscribieron el manifiesto de la Junta Militar de Gobierno que resolvió “poner término a la angustiosa situación política por la que atravesaba el país a fin de enrumbarlo hacia un Estado Democrático de derecho” figuraron: Mario Vargas, Wolfgang Larrzabal, Félix Román Moreno, Oscar Tamayo Suárez, Alfonso Ravard, destacados una década después en la restablecida Democrática.
Un golpe anunciado, se diría hoy, porque muchos fueron los rumores: “Ni estoy caído, ni en plan de huída. Usted me ha encontrado en pantuflas. Y las pantuflas no se usan para correr, declaró el 19 de noviembre en su Quinta “Marisela”, de Los Palos Grandes, a Miguel Otero Silva, jefe  de redacción de El Nacional.
En vísperas del  también llamado “golpe frío” el periódico copeyano «El Gráfico», dirigido por Luis Herrera Campins, publicó la célebre caricatura de de Raman (Rafael Alfonzo Guzmán), con la leyenda el gobierno está: “Como mango maduro…”
El alto mando militar presentó a RG  un documento entre cuyos puntos incluía: expulsar del país a Rómulo Betancourt; desarme de las milicias y despartidización del gobierno.
Solo en lo último accedió el Presidente porque el día del golpe se anunciaba la integración de nuevo Gabinete.
A las 11 am era tomado, y no con el fin magnicida, el Palacio de Miraflores, y en la tarde sin acción criminal, la residencia de RG, detenido con algunos ministros y después enviado al exilio.
Con su derrocamiento se apuntaló al militarismo como poder político, iniciado con golpe contra IMA.
Al margn: Valido de corrupción impregnada de narcotráfico, el régimen autocrático militar ejerce burdos actos para elevar puntaje electoral.

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