El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aprueba este jueves las dos primeras leyes en materia económica, con lo que estrenará los poderes especiales que obtuvo el martes para gobernar por decreto durante un año, a menos de tres semanas de las elecciones municipales.
«Voy a firmar las dos primeras leyes de la habilitante. Pendientes porque quiero que sepan (que) la lucha para proteger al pueblo, la lucha contra los capitalistas usureros, yo la voy a mantener llueve, truene o relampaguee con el apoyo del pueblo», dijo Maduro ante cientos de estudiantes universitarios concentrados en el Palacio de Miraflores, en Caracas.
«Cuenten conmigo juventud de Venezuela, cuenten con este presidente para seguir construyendo el socialismo», añadió el mandatario, quien anticipó que firmará los decreto-ley en un acto en la ciudad de Maracaibo (oeste).
El primer decreto apunta a fijar los márgenes de ganancia de los empresarios entre un 15% y 30%, mientras el segundo está destinado a incrementar los controles sobre las importaciones, de las cuales el país es altamente dependiente, y sobre la venta de dólares al sector privado a la tasa oficial de 6,3 bolívares por billete verde.
Con estos poderes, el presidente busca derrotar lo que denomina una «guerra económica» impulsada por la «burguesía» y el «imperialismo», a la que el gobierno responsabiliza de la inflación del 54% anual que registra el país, el alza de precios y la escasez de algunos productos básicos.
Maduro indicó este jueves que también bajará «todos los arrendamientos de los centros comerciales del país en beneficio de los pequeños y medianos comerciantes».
La oposición y los empresarios consideran que los poderes especiales son una herramienta «con fines electorales» de cara a las municipales del 8 de diciembre, vistas por muchos como un examen a la gestión de Maduro, que cuenta con una desaprobación del 53% de la población, según un sondeo del Instituto Venezolano de Análisis de Datos (IVAD).
Tras la aprobación de los superpoderes, el líder de la oposición Henrique Capriles, quien fue derrotado por Maduro en las elecciones presidenciales de abril por una reducida ventaja, convocó para este sábado protestas en todo el país en rechazo a la ley habilitante y la crisis económica.
El mandatario rechazó la convocatoria del opositor. «Ellos están convocando a incendiar el país para que yo detenga la lucha contra los usureros y los especuladores. Yo lo denuncio hoy y le pido apoyo a la juventud», expresó Maduro en el acto de jóvenes.
Hace dos semanas, el presidente ordenó fiscalizar distintos comercios, los que fueron obligados a bajar sus precios acusados de «usura». La medida llevó a miles de venezolanos a comprar masivamente en los comercios intervenidos.
Esta polémica en torno a los precios tiene como trasfondo el control de cambios que rige en Venezuela desde 2003 y en el marco del cual el dólar se cotiza en 6,30 bolívares, mientras que en el mercado negro supera en más de ocho veces esa tasa.
Esta es la quinta ley habilitante otorgada a un presidente en los 14 años del chavismo en el poder de Venezuela, donde todos los presidentes de los últimos 40 años han gozado de estos poderes especiales.