La policía británica detuvo este jueves a dos personas y liberó a tres aterrorizadas mujeres de una casa en Londres en la que estuvieron cautivas durante 30 años, según la policía.
Se trata de una malasia de 69 años, una irlandesa de 57 y una inglesa de 30.
«Las tres mujeres, que estaban muy traumatizadas, fueron trasladadas a un lugar seguro en el que permanecen», explicó la policía.
Una de las mujeres se puso en contacto con la organización no gubernamental Freedom Charity, que combate la esclavitud y los matrimonios forzados, tras ver un documental sobre sus actividades, y esta se puso en contacto con la policía.
«No habíamos visto nunca algo de esta magnitud», dijo a la prensa el detective de Scotland Yard Kevin Hyland.
«Estuvieron en esta situación al menos 30 años», agregó, precisando que tuvieron algún tipo de «libertad limitada».
«Tuvieron algo de libertad controlada pero estamos estableciendo cómo funcionaba esa libertad», dijo Hyland.
La policía no sabe si la mujer de 30 años nació en la casa del barrio de Lambeth, en el sur de Londres, y tampoco tiene constancia de que las tres tuvieran algún parentesco.
«No sabemos dónde nació pero parece que estuvo bajo servidumbre toda su vida», afirmó Hyland sobre la más joven.
Los dos detenidos tienen 67 años y su nacionalidad no fue especificada. La liberación es el resultado de una investigación sobre «esclavitud y servicio doméstico», precisó Scotland Yard.
Aneeta Prem, fundadora de Freedom Charity, dijo a la televisión Sky News que las mujeres fueron maltratadas durante su cautiverio.
«Creo que sí» sufrieron daños físicos y psicológicos. «Las mujeres tenían absoluto terror a esa gente», explicó Prem. «Es una historia increíble» que «va más allá de la imaginación».
«Se trata básicamente de esclavitud doméstica, y uno no esperaría que eso ocurriese en Gran Bretaña, en Londres, en 2013», agregó.
«No me dijeron nada de eso», dijo Prem cuando le preguntaron si las mujeres sufrieron abusos sexuales.
«La describiría como una casa normal, en una calle normal, que no despertaría sospechas ni entre los vecinos ni entre nadie», narró Prem, describiendo el lugar del cautiverio de las mujeres, en el sur de Londres.
El caso de las tres mujeres es el último de una serie de largos cautiverios descubiertos en los últimos tiempos, aunque ninguno se prolongó tanto años como el de Londres.