Los hechos acaecidos en Venezuela la semana del 12 al 19 de noviembre en curso debe hacernos meditar a los auténticos y dignos venezolanos de todas las esferas e ideologías.
Trilogía del mal y Afiches del Odio
Se habla de amor y felicidad suprema, pero se siembra violencia, odio, un culpable, un enemigo interno y sobre él descarga la ira y los fracasos del que tiene el poder. Es una vieja y maligna práctica autoritaria que termina en masacres y genocidios. El fracaso económico y la cercanía electoral del 8D pareciera exacerbar la locura y la irresponsabilidad del régimen.
En una cadena, Maduro nombró a Henrique Capriles, Leopoldo López y María Corina Machado: “la trilogía del mal”. A los dos días, Caracas apareció llena de afiches fascistas, de elaborado diseño y una amplia distribución, donde se les acusa de ser causantes de las fallas del suministro eléctrico, abastecimiento alimentario y violencia ciudadana, cuando ello es fruto de la incapacidad e ineptitud del gobierno, que promueve el odio, la violencia, un peligor para su integridad física y su linchamiento moral.
Con ello, viola el Art. 60 de la Constitución, que establece: “toda persona tiene derecho a la protección de su honor, imagen y reputación”. y el 19 establece que “todos los órganos del gobierno del Estado deben garantizar a toda persona el goce y ejercicio de sus derechos”. ¿Qué sucede cuando Maduro es la fuente de tal alevosía?. La Fiscal, tan rápida en recibir órdenes y cumplirlas: ¿por qué no enjuicia a Maduro y sus jerifaltes que han producido la trilogía del mal: escasez, precios altos, violencia-odio-inseguridad?
Ocupación de Daka y consecuencias
A) Maduro ordenó, irresponsablemente, la noche del viernes 8 “dejar vacíos los anaqueles de la red de electrodomésticos Daka, pues está especulando con los precios de los productos”. Consecuencia: colas, caos, amenazas a comercios, llevados a cabo en Valencia, Barquisimeto, Caracas, Maracaibo y otras ciudades del país, en días siguientes, con sus consecuentes detenidos por saqueos en Pto.Ordaz y el Zulia.
B) El sábado 9, en otra cadena interminable, se autoexcusó diciendo que él no había mandado a saquear, pero señaló que tenía a los dueños presos; que tenían “empresas de maletín” y vendían los electrodomésticos traídos con dólares Cadivi a 6,30Bs, los revendían a DAKA y estos les ponían precios superaltos. No dijo que los dueños estaban en Panamá desde hace seis meses, según información de los periódicos panameños y hasta con pasaportes diplomáticos venezolanos.
C) La noche del domingo10, en una hora inusual, tras un Consejo de Ministros, en vez de solicitar una tregua a la ciudadanía venezolana, alarmada por la inequívoca percepción que nos han llevado a un desastre económico, se dirigió al país haciendo citas de la Biblia, el Corán y el Torah, sin siquiera una cita de la que él profesa (SaiBaba), sobre la paz, el ahorro. En vez de incitar a la violencia social de días anteriores trató de amedrentar a la sociedad alarmada ante una perspectiva de ruina nacional, eso sí, manteniendo las amenazas contra los comerciantes, fruto de su inocultable incapacidad marxista.
Dos respuestas el lunes 11
1ª.- 600.000 empresarios rechazan campaña oficial: “El presidente de/y Fedecámaras rechazan esta campaña en contra del empresariado. Posiblemente entre nuestros empresarios pudiera haber prácticas desleales que todos condenamos. Pedimos se haga pública la lista de asignación de divisas, única manera de saber cuáles empresarios han especulado, ya que esta información no aparece en Cadivi, aunque el gobierno dice haber entregado 34 millones de dólares. ¿Por qué será? o ¿hay gente chavista en esas listas?
2ª.- Extraído de Aporra.org (web chavista): Dieterich, sociólogo de la revolución, vinculado al difunto Chávez, explicó bajo el título “Saqueos de DAKA:¿aviso de un nuevo caracazo?”, la situación económica de Venezuela, de acuerdo a las medidas suicidas, tomadas por Maduro de no dejar nada en los anaqueles, empujaron a la población a tomar la justicia económica en sus manos. Fueron concebidas por mentes estatistas que aceleran el fin del bolivarianismo; no garantizan el control de la hiperinflación, sino que potenciaron y acercaron el colapso. El precio a pagar por esta ceguera política del régimen es: conmoción social, seguida por el inicio de un régimen militar o elecciones generales que perderá el bolivarianismo”.
Rómulo Betancourt dijo: “El país es de todos y debemos hacerlo todos”. ¿Está de acuerdo?