Con quema de cauchos y cánticos de protestas, habitantes del sector tres de la Ruezga Norte, trancaron la principal arterial vial de la zona a fin de exigir el mantenimiento del sistema de cloacas y el saneamiento de una quebrada adyacente a sus hogares.
La lluvia no hizo mella en sus aspiraciones por concentrar fuerzas y radicalizar su lucha por mejores condiciones de vida, pues a raiz de esta situación, cerca de 30 familias están afectadas por el pestilente olor que ingresa a sus casas, presencia de animales rastreros y la aparición de enfermedades que perjudica la integridad de niños y ancianos.
“En nuestros hogares ingresan ratas, culebras y caracoles por la falta de mantenimiento a la quebrada y a los sistema de cloacas; también se han reportado algunos casos de dengue en niños. El gobernador nos visitó hace unas semanas y nos prometió enviar una cuadrilla de Hidrolara para solucionar el problema. Pero, hasta el sol de hoy, tenemos los mismos problemas a causa de la desatención gubernamental”.
Así lo informó Karen González durante su intervención con los medios de la región.
“Este problema se acrecentó a causa de las recientes lluvias que golpearon fuertemente a nuestra comunidad, lo cual delata la vulnerabilidad de los sistemas canalizadores de las aguas”.
Los protestantes se mantuvieron durante toda la mañana exigiendo la presencia de las autoridades regionales, sin embargo, no encontraron respuestas.
“Cada vez que llueve colapsan nuestras cloacas y se desbordan las baterías de baños, estamos cansados de estos problemas”, reclamó González.
Alrededor de 30 casas están afectadas directamente por su ubicación en el borde del buco canalizador de aguas residuales.
Niños y ancianos vulnerables
Asimismo, la señora Joana Sequera, comentó su situación particular en torno a este problema, el cual ha generado alguno brotes de enfermedades.
“Mi hijo ha sufrido dos veces de dengue en apenas cuatro meses, y así es la situación con muchos niños y ancianos de la comunidad. No queremos que estas circustancias formen parte de un problema de salud pública”.
Finalizaron exigiendo la limpieza de las quebradas aledañas al sector tres de La Ruezga Norte, revisión del sistema de cloacas y la inspección de los sistemas colectores en los hogares afectados.
