El jardinero importado Corey Aldridge experimentó una jornada productiva con jonrón y tres empujadas para empujar a Caribes de Anzoátegui a su segundo triunfo consecutivo, esta vez 7-1 sobre Tigres de Aragua en juego realizado en el estadio José Pérez Colmenares.
La novena de Puerto La Cruz mejoró su registro a 11 y 6 para desplazar a la tropa aragüeña del segundo lugar y mantenerse a un juego del primer lugar, ostentado por Navegantes del Magallanes, que superó a Leones del Caracas.
El ataque anzoatiguense despachó once inatrapables, de los cuales tres fueron conectados por Aldridge, la bujía ofensiva del equipo y principal verdugo del lanzador Omar Poveda, abridor felino, que dejó la lomita tras corto trabajo de tres entradas y cinco carreras aceptadas, para cargar con la derrota, su primera de la campaña.
Paradójicamente, Aragua comenzó arriba en el marcador, al marcar una raya en el primer inning, frente al iniciador Paolo Espino, pero el panameño enderezó en el camino y sumó su primer éxito del torneo. El canaleño, que está en su segunda campaña corrida con el conjunto de Puerto La Cruz, laboró por espacio de cinco capítulos y dos tercios, con seis ponches y ningún boleto otorgado. Tras su salida pasaron por el montículo Richard Salazar y Chris Jones, dúo que no permitió libertades en trabajo conjunto de dos y un tercio para mantener la ventaja de los suyos.
La única marca que permitió Espino, en la parte baja del primer acto, llegó tras un sencillo de Luis Maza, un doble de Alex Romero y un rodado por la intermedia de Héctor Giménez.
La ventaja del club aragüeño duró poco, porque a la altura del segundo capítulo Caribes emboscó a Poveda y le fabricó un mini racimo de tres anotaciones. La primera de las tres carreras se produjo tras un doble de José “Hacha” Castillo y cohete de Aldridge al jardín central. Más tarde, luego de dos outs, Eduardo Escobar, que vive un buen momento con el madero, respondió con tubey para fletar a los dos compañeros que estaban en circulación y poner el tanteador 3-1.
El ataque caribe continuó un inning más tarde, cuando Aldridge, la gran figura de la noche, desapareció la bola con Castillo en bases, lo que aumentó la diferencia a 5-1.
Tras la salida de Poveda, el relevo de los rayados frenó parcialmente la ofensiva anzoatiguense, aunque Castillo se hizo sentir en la parte final con dos remolcadas, una en el séptimo producto de elevado de sacrificio, y otra en el noveno, gracias a un rodado.