Calle, voto y renuncia

Es notorio el desplome del gobierno. Existe un malestar evidente que se refleja en las encuestas que maneja el propio gobierno. Este malestar es consecuencia del desabastecimiento, la inflación, la inseguridad y en general del deterioro de la calidad de vida que sufren los venezolanos como consecuencia de la ineptitud, la corrupción y la ceguera ideológica, que le impide al gobierno tomar las medidas orientadas a resolver la gravísima crisis económica por la cual atraviesa el país.
La ausencia de un liderazgo capaz de crear expectativas positivas, a pesar de lo crítico de la situación, complica aún más el problema. El ingrediente que falta para que el gobierno termine de derrumbarse es político. La oposición tiene la oportunidad de añadir ese ingrediente, no solo con una victoria electoral en las principales alcaldías, sino también dándole a esta victoria un significado político de mayor trascendencia que el simple hecho de ganar alcaldías que antes estaban en manos del gobierno. Es importante, ante la grave situación que vive el país, pedir la renuncia de Maduro, por su incapacidad e ilegitimidad y darle al 8D un sentido de lucha para recuperar la democracia y la libertad. Este elemento político, exigir la renuncia de Maduro, respaldada por una victoria electoral importante en la calle es el toque político que falta para terminar con este desastre, más allá de los pañitos calientes que el gobierno está tratando de utilizar para prolongar su agonía. Las elecciones del 8D son un paso político decisivo para provocar la caída del régimen por una vía democrática y constitucional. Este debe ser el sentido que debe dársele al proceso electoral del 8D.
Esta orientación a la lucha política, que acompaña las elecciones municipales, va a despertar el entusiasmo de mucha gente y alentar a una participación activa en el proceso electoral y la defensa de los resultados. Esta estrategia basada en la lucha por la libertad y la democracia, tiene condiciones muy favorables para tener éxito porque la mayoría de los venezolanos aspira a salir de este gobierno dado el descontento existente por la disminución de la calidad de vida.
Se trata pues de asociar un hecho electoral con una lucha dirigida a lograr la renuncia de Maduro, lo cual va a ser bastante factible si el foco se mantiene en la libertad y la democracia y los resultados electorales son visualizados como una expresión del pueblo contra un régimen totalitario dominado por la dictadura comunista cubana.
A votar en pie de lucha para salir de este gobierno totalitario e ilegitimo. Calle y voto. Maduro debe renunciar.