Con documentos en mano que prueban los compromisos legales de Hidrolara y la Universidad Nacional Experimental de la Seguridad (UNES), para garantizar servicios de agua potable y aguas servidas a este institución, el gobernador de Lara, Henri Falcón, respondió ayer a las afirmaciones del ministro de Ambiente, Miguel Leonardo Rodríguez, recordando que las autoridades de UNES no habían cumplido con su parte, la cual era, precisamente, construir el colector de descarga de aguas negras, así como el acueducto, que debía extenderse desde la universidad hasta la avenida Argimiro Bracamonte, tal como está estipulado en el convenio firmado en mayo pasado por la presidenta de Hidrolara, Adriana Díaz, y la rectora de UNES, Soraya Beatriz Achkar Gousoub.

En ese documento también está plasmado que el principal compromiso de la hidrológica sería el de otorgar la garantía de servicio de acueducto y aguas servidas, la cual ya fue otorgada.

“En mi criterio personal, le lanzaron una bola baja a Nicolás Maduro. Han querido hacer un asunto político de un problema producido por la negligencia de funcionarios del Gobierno nacional, y trajeron al ministro del Ambiente para enmendarlo. Estoy seguro que el ministro apenas se enteró ayer”, declaró Falcón, recordando que cuando se inició la construcción de UNES, el 14 de diciembre de 2012, no se solicitó ninguna garantía de servicio a Hidrolara.

Mostrando un ejemplar de la edición de EL IMPULSO, del sábado 2 de febrero, el gobernador enfatizó cómo los vecinos en la zona de la construcción, habían reclamado por el flujo de aguas negras a cielo abierto tras la rotura del colector principal de aguas servidas del sector, debido a la construcción de UNES, cuya empresa constructora actuó sin notificar a la hidrológica.

Para tratar de solventar el problema, “el Gobierno nacional optó por taponear el colector, desconectando a las comunidades aledañas del sistema de aguas servidas. Luego, lanzaron las aguas servidas al desagüe de aguas de lluvia, y entonces empezaron a hacer reuniones formales con Hidrolara”, señaló, precisando que la propia directora de Infraestructura y Proyectos Especiales de UNES, Zandra Vásquez, se había reunido con la hidrológica, comprometiéndose a iniciar los trabajos estipulados en el convenio. “Este es un problema técnico y administrativo, y también de falta de carácter político del Gobierno nacional”, acotó el gobernador Falcón.

Intervención

Sobre la posibilidad de que el Estado intervenga a Hidrolara, el gobernador dijo que lamentaría mucho tal decisión, principalmente por el equipo de profesionales de la hidrológica que se verían perjudicados, así como la calidad del servicio. “Veríamos el caos en esta entidad, si decidieran intervenir a Hidrolara”, dijo.

Por su parte la presidenta de Hidrolara, Andriana Díaz, informó que el martes había recibido una llamada, mediante la cual se le pidió que asistiera a una reunión con el ministro de Ambiente. “Querían escuchar la parte de Hidrolara para conocer cuándo inició el problema de la UNES. Llevé el expediente y explicamos todos los tropiezos que hemos tenido con la constructora y lo ocurrido con las tuberías de acueducto y de cloacas, fracturadas por el paso de camiones pesados durante el proceso de construcción. El ministro hizo énfasis en que admitiéramos que teníamos poca voluntad, debido al hecho de que la obra no había sido iniciada”, expresó Díaz.