El alemán Sebastian Vettel (Red Bull-Renault), ganador de los tres últimos mundiales de Fórmula 1, se impuso este domingo en el Gran Premio de Japón, en el circuito de Suzuka, aproximándose un poco más al título.
Vettel no es matemáticamente campeón del mundo de la temporada ya que su principal rival, el español Fernando Alonso (Ferrari), terminó en cuarta posición, aunque amplió su ventaja a 90 puntos sobre el asturiano, cuando quedan cuatro pruebas para el final.
La segunda posición en el Gran Premio de Japón fue para el compañero del alemán en Red Bull, el australiano Mark Webber, completando el podio el francés Romain Grosjean (Lotus).
Esta es la trigésimo quinta victoria de Vettel en Fórmula 1, nueve de ellas esta temporada en 15 pruebas disputadas, y la quinta consecutiva desde el Gran Premio de Bélgica, a finales de agosto.
Vettel está lanzado hacia su cuarta corona consecutiva que podría lograr en la próxima carrera, el 27 de octubre en India, si mantiene una ventaja de 75 puntos sobre Alonso.
El alemán hizo una carrera perfecta y aprovechó una estrategia de dos paradas para cambiar de neumáticos, mientras que su compañero australiano, que salió en la “pole position”, realizó tres.
Grosjean tuvo un buen inicio, sorprendiendo a los dos Red Bull en la primera curva, y fue líder del principio de la carrera, aunque después fue víctima de la estrategia de su equipo, menos eficaz que la de Red Bull para Vettel.
“Hice una salida horrible y después me pude recuperar”, reconoció Vettel al final de la carrera.
Al terminar cuarto, cuando era octavo en la parrilla de salida, Alonso hace mantener el suspense hasta el Gran Premio de India.
Parece imposible que el español pueda arrebatar el título a Vettel. Para ello debería ganar los cuatro últimos grandes premios, que le darían 100 puntos (25 por el primer puesto en cada uno) y que el alemán lograra menos de diez unidades en total.