Ex-alumnas “Onas” del Colegio Inmaculada Concepción
Recordar es VIVIR
Una de las etapas más hermosas de la vida de una mujer es su niñez y adolescencia, son épocas de inocencia, de mucha complicidad, coquetería, sueños e ilusiones que van de la mano del anhelo de crecer, ser grande, bella, inteligente y que llegue algún día un príncipe azul, y la acompañe en lo que creen es un paraíso, la vida.
En ese trayecto del crecimiento, las niñas crean su club de amistades, sus aliadas y cómplices en travesuras, las ex-alumnas del Colegio Inmaculada Concepción, que salieron en de esta institución educativa en el año escolar 1976-1977, quisieron recordar estos bellos momentos en donde la fantasías y anhelos no se sentían lejanos, y el elegir el color indicado del vestido para un baile, era la decisión más sería a la que se enfrentaban.
Las compañeras de estudio y travesuras, planificaron con mucha antelación y determinación, una recepción que denominaron Reencuentro de las “Onas” Tarbesinas, en alusión a que el Colegio forma parte de la Congregación de San José de Tarbes, y a que la mayoría de ellas ya son “Cincuentonas”, recordando la alegría de sonreír y bromear hasta de si mismas.
Este fraternal encuentro que se pudo llevar a cabo, luego de más de un año de organización, logró reunir a 45 de las 60 ex-alumnas, que conformaban las dos secciones que estudiaron paralelamente en el mismo período, y algunas de ellas casi desde kínder y primaria. Este fue un número importante que no sólo demostró su unión y amistad, sino el deseo que todas tenían disfrutar juntas, verse y conversar de nuevo.
En este día muchas utilizaron el uniforme del colegio, y otras el emblemático traje de Alitas de las Guías Scout, un toque pícaro para rememorar esos tiempos. Una de las sorpresas más importantes para las ex-alumnas fue la presencia de la hermana Aída Mercedes, quién además de haber sido su maestra de sexto, fue un icono para todas, ya que era la maestra más joven del colegio, y era una de las más cercanas y complacientes en aquellos tiempos de ayer.
Aura Marina Rodríguez
Fotos: Antonio Barbiero