Un fuerte enfrentamiento entre los miembros de la banda de “El Pollo” y efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana estremeció a los habitantes de la ciudad de Quíbor, municipio Jiménez, la madrugada de este sábado. En el hecho falleció Keibys Javier Hernández Ochoa (19), apodado “El Gufy” y miembro del grupo delictivo.
El enfrentamiento ocurrió cerca de las 5:00 de la madrugada y donde participaron efectivos de la Comisión de Inteligencia de la GNB, quienes llevaban una semana de seguimiento a los delincuentes en el sector de El Yabito, en la parroquia Coronel Mariano Peraza.
Desde la noche anterior, miembros de la mencionada comisión, en motocicletas, aguardaban en una quebrada de las inmediaciones, cuando vieron pasar a un grupo de 8 hombres, a quienes dieron la voz de alto, suponiendo que se trataba de agricultores de la zona. Sin embargo, los aludidos hicieron caso omiso al llamado y procedieron a abrir fuego contra los efectivos, desatándose un intenso intercambio de disparos y causando zozobra entre los habitantes de todo el sector.
En el altercado registrado en mayo resultó muerto uno de los cabecillas de la banda que formara Carlos Eduardo Pérez, mejor conocido como “El Guly”, quien perdió la vida tras otro enfrentamiento con la GNB y el GAES. El fallecido en esta ocasión responde al nombre de Keibys Javier Hernández Ochoa (19), quien recibió un impacto de bala con entrada en el hombro izquierdo y salida en la espalda. Se supo que justo antes de sucumbir a la mortal herida, “El Gufy” arrojó una granada de mano en un último intento para enfrentar a la comisión de la GNB, pero sólo cayó como a 3 metros de donde se hallaba, detonando sin causar heridos.
Se estima que durante el enfrentamiento, los delincuentes detonaron otras tres granadas. Además, de la comisión de 6 efectivos, uno resultó herido de bala en la pierna izquierda. En las siguientes horas de la mañana, otros miembros de la GNB resguardaron la entrada del Hospital Baudilio Lara de Quíbor, a donde habría sido trasladado el funcionario herido. Asimismo, en el lugar donde se ocultaban los malhechores, cerca de la quebrada de El Yabito, hallaron un revólver calibre 38, una escopeta pajiza, entre 10 y 12 casquillos de fusil y una pipa para fumar droga. Al parecer los miembros de la banda usaron dos fusiles tipo FAL para defenderse.
También resultó herido otro de ellos en el intercambio de disparos, pues se consiguió un rastro de sangre de casi 2 kilómetros desde el lugar del hecho. Se presume que podría tratarse de otro de los jefes de la banda, a quien apodan “El Pollo”.