Un total de 120 niños con edades comprendidas entre los tres y cinco años, no pueden recibir clases correctamente en el Centro de Educación Inicial El Cují, puesto que problemas en la estructura física y el abastecimiento de servicios básicos han mermado su calidad académica. Por ser una institución dependiente del Estado, solicitan al gobernador la atención inmediata de sus requerimientos.
El pasado viernes 20 de septiembre a las tres de la tarde, una ventisca de altas proporciones que azotó la ciudad de Barquisimeto, ocasionó que un árbol de gran altura cediera de raíz hasta caer encima de la cerca perimetral y del parque infantil del preescolar, los cuales quedaron notoriamente afectados, al igual que el sistema eléctrico de dos aulas de clase.
El árbol permaneció durante varias semanas pese al levantamiento de un informe técnico por el Cuerpo de Bomberos del municipio, hasta que el comité de padres y representantes se encargó de remover, bajo su propia iniciativa, los restos de la planta. Sin embargo, los escombros yacen a la espera de un vehículo que los transporte.
Yenny Trejo, directora de la institución, exigió la atención inmediata de Infralara, organismo encargado de realizar mantenimiento preventivo a las instituciones educativas del estado, pues también la maleza es hogar de animales rastreros que pueden representar un peligro para la integridad de los infantes.
“Necesitamos con urgencia ayuda gubernamental a fin de garantizar la óptima calidad de estudio para nuestros alumnos. En realidad no comprendemos por qué no se hicieron trabajos preventivos antes de iniciar el año escolar”.
Además, Trejo añadió que hace un llamado al Ministerio del Ambiente, debido a la existencia de un árbol inclinado que amenaza dos de las aulas del recinto escolar.
“Tenemos el temor de que pueda ocurrir otra ventisca que quiebre el tallo de la planta y caiga sobre el techo. Para remover el árbol, tenemos entendido que luego de un estudio de posibles riesgos, el Ministerio aprueba la remoción”.
Servicios básicos
Por otra parte, la profesora Eumary Meléndez, notificó al equipo reporteril, que la empresa Hidrolara cuenta con varias semanas sin suministrar el servicio de agua en la institución, aunque los tanques están en buenas condiciones, se encuentran vacíos a falta del vital líquido.
“Sólo tenemos agua los días lunes por tubería del sistema de la calle, lo cual no es suficiente porque a mitad de semana no contamos con el vital líquido para abastecer las necesidades de nuestros niños”.
Baños en mal estado
Asimismo, informó que la batería de baños requiere de mantenimiento, puesto que presenta deterioro por falta del acondicionamiento preventivo.
“Es necesario también que se reparen los baños de este preescolar. Los niños realizan sus necesidades constantemente por lo cual es pertinente contar con una apropiada estructura a fin de que no sea perjudicada su salud. Además, por este deterioro, se pierde una ingente cantidad de agua a través de los sanitarios que están dañados”.
Laboran media jornada
Cabe recordar que esta institución, como otras en el estado, labora a media jornada por el conflicto sindical del magisterio en busca de mejores reivindicaciones. Sin embargo, los docentes de este recinto afirmaron que cumplirán con el proceso escolar de los alumnos pese a no contar con una remuneración acorde para sus necesidades básicas.
