Jean Carlos Hernández, de 31 años, iba manejando un vehículo modelo Neón de color azul. Junto a él, en el asiento del copiloto, estaba un niño de 9 años.
Al parecer, Hernández conducía a exceso de velocidad por la avenida Ribereña, sentido este-oeste. Luego que pasó diagonalmente el puente Macuto, en toda la curva, perdió el control, saltó la isla y se estrelló contra una camioneta Jeep Gran Cherokee de color beige que transitaba por el canal del medio, sentido oeste-este.
El fuerte impacto que recibieron Jean Carlos y el niño de 9 años, les quitó la vida a ambos en el acto.
La escena era escalofriante. En el puesto del piloto estaba Jean Carlos Hernández y sobre él, prácticamente abrazado, se encontraba el niño.
El conductor de la camioneta Jeep, por fortuna, no falleció, pero su estado era de shock. De inmediato lo trasladaron hasta la Clínica Canabal para su atención médica.
Minutos después, Mao Flores, el padre del niño fallecido, llegó al sitio y exclamó: “¿Dónde está mi hijo?… ¿Él está bien?”, pero uno de sus compañeros le dio la terrible noticia.
Se conoció que reside en Caracas y vino esta semana a Barquisimeto para realizar unas diligencias con su hijo, en cuestión de papeles.
“El niño estaba con un amigo del señor Mao”, indicó una de los familiares.
La terrible escena se volvió todavía más conmovedora, cuando la señora Yakelyn Mena, madre del pequeño, no pudo ocultar su dolor. Abuela y demás parientes buscaban consuelo ante la pérdida inesperada. El niño estudiaba en la Escuela Costa Rica. Residía con su mamá y su abuela.
El pasado 25 de septiembre del presente año, en la Ribereña, en el distribuidor Uruguay, también perdieron la vida dos damas, Gladys Crespo de Olmos, de 61 años, y Rosángel Torrealba, de 28 años, luego de un triple choque.