Yasmery Mendoza, tía del efectivo de Polilara, Junior Rafael Luque, asesinado el 6 de noviembre de 2011, protestó ayer junto a varios parientes frente al Edificio Nacional en Barquisimeto para exigir justicia: “Mi sobrino fue asesinado en la población de Anzoátegui, en Morán.
Seis meses después el asesino se entregó en la Fiscalía 10 y hasta el día de hoy le siguen haciendo juicio. Mi sobrino era un muchacho honrado que fue criado con principios y no se metía con nadie. Él vivía en Guarico, en San Rafael, y era el único hijo de mi hermana. Había cumplido 23 años el 2 de noviembre y el día 6 se fue a celebrarlo en un centro nocturno en Anzoátegui.
Ahí se encontró con Danny Colmenárez, apodado ‘El Tuco de la Sabana’, quien le propinó una herida con un cuchillo. De allí lo trasladamos a Guarico y luego lo llevamos a Barquisimeto, donde murió. Hay suficientes pruebas de que ‘El Tuco’ lo mató.
Queremos que se haga justicia. Se supone que hoy (ayer) es el último juicio, pero en noviembre se cumplirán dos años del hecho y aún no se ha emitido una condena.
Mi sobrino alcanzó a hablar conmigo antes de morir y me dijo que había sido ‘El Tuco’ quien lo hirió mientras él estaba en el pasillo del establecimiento enviando un mensaje de texto.
Ese mismo día ‘El Tuco’ ya había herido a otras cuatro personas, pero sólo una ha sido llamada a testificar. He sido amenazada por la hermana de ‘El Tuco’, quien dice que me mandará a cerrar la boca. Si pierdo la vida por hacerle justicia a mi sobrino, así será”, dijo, criticando que al acusado se le permitieran visitas y sus familiares le dieran dinero en los tribunales.