Todo comenzó aproximadamente a las 8:00 pm., en el Centro Socioeducativo Pablo Herrera Campins, conocido como El Manzano, cuando unos 45 adolescentes de la letra C, “realizaron actos vandálicos, quemaron colchonetas y causaron destrozos por una riña entre dos de ellos”, informó Marielys Sánchez, directora del reclusorio.
Recordó que al momento del hecho, los funcionarios de la Policía del estado Lara intentaron calmar la situación pero les lanzaron piedras, por lo cual dos féminas y un masculino resultaron heridos. “Los daños fueron materiales. Llamamos a la juez de Ejecución y al fiscal 18 quienes fueron hoy en la mañana (lunes) a levantar el informe y como causaron destrozos ahora se les imputarán nuevos delitos”.
La capacidad de El Manzano es para 120 adolescentes, sin embargo, en la actualidad tienen 305 detenidos, más a los 110 adultos que mantienen recluidos. “Hacemos un llamado al Sistema de Responsabilidad Penal porque con la presencia de los mayores de edad, se les vulnera el derecho a los adolescentes, sin embargo, el gobernador Henri Falcón, mandó a construir nuevos espacios para ellos pero no es suficiente”.
Sánchez reiteró que todos los que allí permanecen tienen garantizado el derecho a la salud y educación, por lo cual en horas de la tarde, los 45 jóvenes de la letra C, fueron trasladados hasta el médico forense para que los evaluaran.
Mientras tanto, afuera del lugar se encontraban unos padres de los privados de libertad, una de ellas, la señora Zeyla, quien no quiso decir su apellido, es oriunda de Quíbor y la noche del domingo recibió un mensaje donde le informaban que “le estaban pegando a los muchachos afuera. A nosotros como madre sí nos duele (…) él tiene un año preso porque lo implicaron en un homicidio, en marzo de 2014 cumple los 18 años, pero esto no se va a quedar así”, aseveraba la mujer apretando una biblia que llevaba en sus manos, mientras las lágrimas en el rostro se dejaban ver.
“Él está en la letra C. Ahí ocurrió todo. No sabemos nada; estamos con incertidumbre”, comentaba. A su lado permanecía Hernán Narváez, quien aseguró que tuvo un presentimiento desde anoche y ayer temprano llegó a El Manzano, “ayer (domingo) la visita fue normal, él está en la B”.
También pidió mejoras en las condiciones en las que según él, viven los jóvenes, pues “esos calabozos están muy malos. A veces los maltratan y les pegan”.
