Para hoy docentes regionales y nacionales marcharán por sus beneficios laborales.
Luego de la aprobación de las cláusulas económicas de la VII Convención Colectiva, EL IMPULSO decidió conversar con Xiomara Guanipa, secretaria de Finanzas del Colegio de Profesores , a fin de pulsar su opinión sobre los distintos acuerdos que amparan los derechos laborales de los docentes.
En primer lugar, planteó su posición personal argumentando que el aumento fraccionado, durante dos años de 97%, no representa la realidad económica de los educadores, puesto que la creciente cifra inflacionaria aventaja con creces el porcentaje propuesto por el Gobierno Nacional.
“El Gobierno logró salirse con la suya en la mesa de negociación de la contratación, debido a que logró imponer una cifra, mucho menor, al 160% que aspiraba las nueve federaciones presentes. Los sindicatos participantes nos informaron que el Ministerio de Educación les exigió cumplir con dicha cifra con la amenaza de imponer sus propias condiciones bajo decreto. Allí fue el primer error, pues los representantes magisteriales debían informar sobre estas acciones emanadas en contra de nuestras reivindicaciones”.
En ese sentido, cuestionó la realidad económica del país, donde explica que un militar percibe mejores beneficios que un docente en la actualidad.
“A nosotros nos dan estos pírricos beneficios, cuando a los militares les aumentan considerablemente su salario y perciben otros beneficios como la opción de compra de vivienda y vehículo. No entendemos porque cercenan nuestros beneficios si nosotros somos lo constructores del país, hasta un militar debe pasar por la educación del docente en su proceso de formación”, expresó Guanipa.
Asimismo, explicó desde su opinión profesional en materia económica que la Convención Colectiva no logra los avances esperados por el magisterio.
“Nos aumentan un 50% este año cuando existe una inflación que alcanza el 47%, es decir, que sólo por este año nos aumentaron un 3%. Para el 2014, esperábamos un 70% de aumento y nos resolvieron con un 25% sin estimar la cifra inflacionaria de ese año”.