David Nalbandian, quien durante cinco temporadas consecutivas figuró entre los 10 mejores tenistas del mundo, anunció su retiro de la actividad debido a una serie de lesiones que entre otras cosas le impidió jugar la última semifinal de la Copa Davis, un torneo que el argentino se moría por ganar.
Además de desgarros y otros problemas físicos, Nalbandian acusa un dolor en el hombro que le impide entrenarse con normalidad por lo que puso punto final a su exitosa carrera de 13 años en el circuito.
“Es un día difícil, estoy súper agradecido a este deporte, que me dio todo”, dijo en reunión de prensa Nalbandian, de 31 años, leyenda del tenis argentino y que figuró entre los 10 mejores del ranking durante cinco temporadas consecutivas entre 2003-07.
“El hombro no me respondió bien. Y así no puedo competir al nivel ATP”, destacó Nalbandian, quien en 2006 llegó a figurar número tres en el mundo. “La Davis es una espina que no se pudo cumplir, pero se dio así”.
La Davis fue una gran obsesión de Nalbandian, que estuvo en tres de las cuatro finales que perdió Argentina: 2006, 2008 y 2011.
“Faltó ganar dos puntos, nada más que eso; siempre estuvimos cerca en los últimos años”, dijo. “Faltó la estocada final”.
Nalbandian, ausente por lesión a mediados de setiembre cuando Argentina perdió 3-2 en semifinales ante República Checa, en Praga, jugó 29 partidos individuales en Davis, con 23 victorias, y 21 en dobles, con 16 triunfos.
También fue finalista de Wimbledon en 2002, cuando cayó ante el australiano Lleyton Hewitt.
Ese torneo, junto con el título de la Copa Másters de fin de temporada en 2005 en Shanghái, cuando remontó una desventaja de dos sets ante el suizo Roger Federer, figuran entre los recuerdos más gratos en la carrera del argentino.
“Están entre los mejores momentos que he vivido en el tenis», dijo Nalbandian.