Ante la reciente denuncia hecha por el presidente del diario EL IMPULSO, acerca de los obstáculos para obtener divisas destinadas a la compra de papel y otros insumos que requiere esta rotativa, y la manera en que esto infiere la política de intimidación y silenciamiento por parte del Gobierno nacional hacia los medios de comunicación, ayer fueron entrevistados al respecto representantes de sectores comerciales e industriales larenses, quienes se solidarizaron con la causa del decano de la prensa nacional.
De esta manera, Alejandro Tovar, presidente de la Cámara de Comercio del estado Lara, comentó: “Eso es muy normal en países totalitarios. Está claro que la opinión pública en diarios y prensa es de suma importancia para cualquier Gobierno, menos para los regímenes dictatoriales. No entiendo por qué el Gobierno actúa así contra EL IMPULSO, que es un icono y un diario emblemático para Barquisimeto”.
Tovar indicó que plantearía esta situación en el próximo directorio que sostendrá la Cámara de Comercio, añadiendo que al Ejecutivo nacional le convendría, más bien, que existieran más diarios y mayor opinión pública.
“Pareciera que quiere amedrentar, asustar e intimidar a la población. Ahí está el caso de los gerentes del Sambil, quienes están detenidos sin ningún fundamento. Pienso que el Gobierno está equivocado”, dijo.
Y en relación a un pronunciamiento por parte del sector comercial sobre las trabas que enfrentan EL IMPULSO y otros medios, Tovar señaló: “Tenemos que usar las armas que nos proporcionan las leyes, y protestar, hablar, comunicarnos y ofrecer declaraciones sobre estos casos. Sería interesante visitar la sede de EL IMPULSO o invitarlos a un directorio. Tenemos que hacer algo. Ya he leído las declaraciones del presidente de EL IMPULSO y estoy seguro que se van a defender y la situación denunciada no llegará a más, porque se trata de un diario de Lara que la gente ha hecho propio”.
Industria afectada
Por su parte, Luis Marín, presidente ejecutivo de la Cámara de Industriales de Lara, indicó: “Para nosotros EL IMPULSO también es una industria que se ve afectada por esta serie de controles que hoy tienen en menoscabo a las operaciones de todo el sector industrial que, en gran medida, depende de materia prima importada para la cual es necesario obtener divisas.
Además de este elemento dañino que coarta la libertad de expresión de un medio de comunicación tan importante, al no permitirle contar con los recursos para mantener la materia prima requerida, también está el hecho de que esa industria le da empleo a centenares de larenses y venezolanos.
Estamos hablando de empleos productivos que no dependen del Estado y que ofrecen un bien tangible como es este periódico que todos los días podemos apreciar”. Asimismo, Marín recordó que los representantes del sector industrial han venido extendiendo un llamado, desde hace mucho tiempo, al Gobierno nacional para que flexibilice todo lo vinculado con el control cambiario, pero que además de esto, también se siente en una conversación franca con el sector productivo para determinar, de alguna manera, cómo es posible reactivar el aparato productivo nacional que actualmente depende de las importanciones como consecuencia de todas las políticas.
“En Venezuela son muchas las cosas que se importan que pueden producirse a nivel local. Sin embargo, todo ello depende, en gran medida, de una concertación nacional que pasa, en primera instancia, por el hecho de que el Gobierno reconozca a ese otro actor que es el sector privado en sus diferentes ramos y modelos”.
