El tercera base de los Royals, Mike Moustakas, podría formar parte de la importación de Cardenales de Lara para la próxima campaña de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional, según publica el portal oficial de Kansas City en MLB.com.
Según el reportero Dick Kaegel, el estadounidense tiene la intención de venir a jugar a Venezuela para corregir algunos detalles en su swing y por la buena relación que mantiene con Pedro Grifol tiene toda la disposición.
La publicación revela que el antesalista jugaría parte de la temporada regular con el uniforme de los pájaros rojos. De hecho citan que será compañero del campocorto Alcides Escobar.
“Estoy realmente emocionado con eso. Voy a ir con Pedro (Grifol) por algunas semanas y solo seguiré trabajando”, dijo Moustakas al citado periodista.
“Va a ser un estilo de béisbol un poco diferente, pero va a ser divertido”, prosiguió el norteamericano, quien tuvo una temporada discreta con el madero, a pesar que estaba llamado a ser una de las figuras ofensivas de los Reales.
El tiempo de juego no se ha determinado todavía, sin embargo, el tercera base aseguró que estará en Venezuela entre tres y cinco semanas.
Moustakas tuvo una producción muy baja con el bate, al conectar para promedio de .233, con 13 estacazos de cuatro esquinas y 43 carreras remolcadas.
En la primera mitad de la campaña conectó .215, con seis bambinazos y 17 producidas, mientras en la segunda parte levantó el nivel al batear .259, con seis jonrones y 25 impulsadas.
El paleador zurdo se sintió a gusto con el trabajo que realizó Grifol como coach de bateo de Kansas City, por lo que tomar la decisión de viajar a Venezuela no fue una decisión complicada.
El contacto directo lo realizó el propio Grifol, sin embargo, la gerencia de Cardenales no ha establecido un contacto directo con el jugador, hasta que no se finiquiten todos los detalles correspondientes al Winter League Agreement.
Apenas se concrete el acuerdo entre MLB y las Ligas del Caribe, el alto mando de los crepusculares debe realizar las gestiones correspondientes para concretar la negociación y acordar el tiempo de juego, además del salario.
“Es un muchacho que siempre ha tenido gran proyección”, dijo el mánager Ned Yost. “Empezó algo lento y se puso presión. Tiene que aprender a relajarse y manejar esas situaciones”.
