Pido la palabra – Hasta la moral…

Todas las encuestadoras, hasta las del propio régimen, exhiben números nada halagadores para el gobierno. No es sólo en las capitales de estado donde ganarán holgadamente los candidatos de la coalición opositora, sino que además, las tonalidades plebiscitarias que está tomando el proceso electoral del próximo 8 D, indican una muy holgada ventaja hacia el voto castigo que busca deslegitimar al usurpador, independientemente de quién sea el candidato en determinado municipio. Esta situación electoral se presenta como derivación lógica de la abrupta polarización con tendencia hacia la radicalización de algunos factores extremos, de ambos lados, donde la ventaja en la tendencia del voto la tienen los factores democráticos…
Es lógico observar estos números luego de los casi 15 años en un ejercicio corrupto del poder por parte del chavismo. Problemas tan elementales, tan básicos como el suministro de luz y agua, por ejemplo, no fueron resueltos a pesar que los recursos se asignaron en su momento. Este régimen se ha gastado una inimaginable fortuna para exhibir unos vergonzosos resultados de ruina nacional. Una vez superado el paro petrolero, el precio del petróleo se dispara hasta 140 $/barril para estabilizarse en un promedio de 100. El país percibe unos gigantescos ingresos extraordinarios que le permiten insertarse en un agresivo plan de inversiones en materia de infraestructura, agro industria  y transporte, que le hubiesen permitido saldar parte de la deuda social que hasta los momentos no hemos podido pagar a nuestro pueblo. Lamentablemente, el plan ferroviario nacional, el metro de Maracaibo, el metro de Valencia, las nuevas líneas del metro de Caracas, Transbarca de Barquisimeto (recientemente terminado luego de 7 años de abandono), Trolmerida de Mérida (tomo 7 años su puesta en servicio), además de otras inversiones en áreas estratégicas, se transformaron en fantasmales obras abandonadas en proceso de deterioro prematuro a lo largo y ancho de toda la geografía nacional…
Es impresionante observar el sobredimensionamiento de las estructuras  de las vías férreas por toda Venezuela. El signo del despilfarro y la corrupción marcan la pauta en un país que tuvo la gran oportunidad histórica de aprovechar la bonanza circunstancial de los precios petroleros de los últimos 14 años, pero se hundió en el lodazal de la ineptitud y la corrupción para devorar las arcas nacionales y endeudar el país de la manera más absurda. Para que tengamos una idea de lo que estamos hablando; la diputada María Corina Machado, habla de 85 mil millones de dólares invertidos en el sistema de suministro eléctrico nacional, para encontrarnos con el cuadro de destrucción y obsolescencia de instalaciones y equipos que acusa un verdadero desastre en el sector eléctrico.
El balance revolucionario es precario en materia de infraestructura, debido a que el país ha sido sometido al indignante saqueo histórico más gigantesco que nuestra vida republicana pueda recordar. La pérdida de los valores básicos de la moral pública es el signo más relevante de estos tiempos de revolución. La facilidad e impudicia con la cual se roban la plata los funcionarios del alto gobierno para exhibir grandes fortunas y niveles de vida ostentosos y grotescos, desnudan el tamaño de una crisis de valores muy seria, instalada en las entrañas republicanas. Estamos en presencia de una nueva clase política, consolidada en prostituidos cuarteles, que se ha adueñado del país y de sus riquezas durante estos 15 años para etiquetarnos ahora como un narco estado. Na guará; estos tipos son tan impúdicos, que hasta la moral… se la robaron.!!!
Mis comentarios:
.- Resulta insólito pensar en el embarque de más de cien maletas de drogas en el aeropuerto internacional Simón Bolívar, sin complicidad de alto nivel…Esto no es la primera vez que ocurre.
.- Este tipo de situaciones se presta para servir la mesa a los órganos internacionales  para ir pensando seriamente en una declaratoria de estado forajido o narco estado…
.- Las dóciles y amigables posturas de la revolución chavista con grupos extremistas del mundo, nos colocan en una situación bien seria en relación a nuestra posición geopolítica, más allá de la crisis interna que nos mata de hambre…
…Cada vez que me asaltan los malignos para devorar mi carne, son ellos, mis adversarios y enemigos, quienes vacilan y caen…(Proverbios 27: 2).
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