La tarde del jueves Yordi José Garrido Colmenárez, de 18 años, falleció por inmersión en la laguna de El Mamón, del sector con el mismo nombre, ubicada en las inmediaciones de Pavia. Sin embargo, su cuerpo sin vida fue rescatado al mediodía del viernes, toda vez que el Cuerpo de Bomberos de Iribarren no contaba con los equipos necesarios para realizar el procedimiento correspondiente, por lo cual los familiares del occiso protestaron para ejercer presión y lograr el operativo.
José Garrido, padre de la víctima, comentó que su hijo vivía junto a él y su pareja a unos 500 metros del lugar del suceso, la tarde de ayer, se acercó hasta la laguna a bañarse, “pero él no acostumbraba a ello, generalemente en las tardes se iba a jugar fútbol, no sé por qué le provocó pero se metió. No sabía nadar y murió ahogado”.
Garrido andaba para el trabajo, a las 6:00 p.m., aproximadamente, cuando regresó se consiguió con la lamentable noticia. En ese momento le informaron que los mismos familiares habían iniciado las labores de rescate del cadáver pero fue un trabajo sin resultados positivos. “Ahí siempre se la pasan niños y jóvenes bañándose. Los bomberos llegaron pero no pudieron hacer nada y al rato se fueron sin volver”.
La comunidad enardecida por la situación, quienes además estuvieron hasta altas horas de la noche sumergiéndose en las profundas aguas de la laguna en búsqueda de Yordi José, decidieron trancar desde temprano la vía principal de Alí Primera a fin de ejercer presión y lograr que los organismos de seguridad se dedicaran a su labor. Quemaron cauchos, gritaron consignas, pidieron y exigieron que rescataran el cadáver del ciudadano.
“Ellos dijeron que no tenían los equipos necesarios, por eso manifestamos nuestro descontento”, aseguraba indignado. El padre de 10 hermanos, narró que la noche del jueves fue un total calvario para ellos. “Mi esposa María Colmenárez se puso muy mal; ella sufre de la tensión y tuvimos que hospitalizarla”.
Volvieron los bomberos
Aproximadamente a las 10:00 de la mañana, cinco efectivos del Cuerpo de Bomberos, a cargo del teniente Martín Castillo, iniciaron el operativo quitando las ramas y malezas de la orilla. Luego irían a aguas profundas, a unos 30 metros de radio, para tratar de conseguir el cuerpo sin vida. “Necesitamos sumergirnos sino conseguimos nada, pero para ello se necesitan mascarillas, trajes de neopreno, entre otros equipos especiales”.
Él aseveró desconocer si otra comisión del organismo había ido la tarde del jueves.
Finalmente, al mediodía de ayer, lograron el hallazgo del cadáver de Garrido Colmenárez, a quien le procederían a hacer la respectiva autopsia a fin de determinar las causas de su muerte.
Se conoció que el ahora occiso tenía una hija de seis meses. Además era ayudante de albañilería.