El presidente Nicolás Maduro informó este miércoles que suspendió su viaje a la 68va Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en Nueva York porque existían supuestas “provocaciones” organizadas por la derecha internacional, y así para»preservar su integridad física» y su «vida», tras recibir informaciones que revelaban planes violentos contra él, según denunció.
«Había dos provocaciones contra mí en Nueva York, en Vancouver evaluamos en detalle la información que me llevaron, habían dos provocaciones graves, pudiera haber dos escenarios, que el Gobierno estadounidense sabe y la debilidad del Gobierno de Obama no les permite tomar acciones para que no se ejecuten estas provocaciones, pareciera imposbile creer que el presidente Obama esté enterado y deje que se den», dijo desde el estado Aragua, donde hizo la inspección de la planta automotriz china.
De acuerdo con el primer mandatario nacional, las supuestas «provocaciones» estaban planteadas con la intención de tensión en los medios internacionales, mientras que la otra estaba relacionada con «afectar» su integridad física.
«Cuando llegué a Vancouver evalué la información directa que nos llegó de varias fuentes. En ese momento fue que decidí en firme continuar el camino hasta Caracas y suspender el viaje a Nueva York para cumplir un objetivo máximo (…) que es preservar mi integridad física y preservar mi vida…En otro momento iremos, cuando se garantice que estos grupos locos que están detrás de una actividad bien peligrosa que se estaba preparando en Nueva York por el clan de Roger Noriega y Otto Reich (…) Ese clan tenía preparado una provocación loca», señaló.
Por otro lado, aseguró que su viaje a China fue realizado en el avión del ALBA porque el avión presidencial presentaba fallas “graves”, que les generó sospecha, pues la aeronave permaneció durante cinco meses en el hangar de AirBus en Francia para ser revisado.
«Yo tenía una corazonada y lo mandé a revisar con peritos venezolanos».
Agregó que con asesoría de un bufete internacional están preparando acciones judiciales de fondo contra la empresa AirBus de Francia.
Foto: Archivo
