El presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, dijo este domingo que su sobrino y la novia de éste se encontraban entre las 59 víctimas mortales en el centro comercial de Nairobi tomado por asalto por un comando islamista.
«No podrán escapar a las consecuencias de sus actos despreciables y bestiales», dijo Kenyatta en un emotivo discurso a la nación. «Castigaremos a los autores intelectuales» de este ataque, añadió.
«Siento el dolor de cada vida perdida, y comparto su dolor ante la tragedia de nuestra nación», agregó el mandatario.
Un comando islamista integrado por unos 10 hombres encapuchados irrumpieron el sábado a mediodía en el centro comercial Westgate disparando con armas automáticas y arrojando granadas contra clientes y empleados de este lujoso centro comercial.
Los shebab somalíes, vinculados a Al Qaida, reivindicaron a través de Twitter la matanza y señalaron que la operación es una represalia contra la intervención de las tropas kenianas en Somalia y que ya «previnieron a Kenia en numerosas ocasiones».
Al menos 59 personas perdieron la vida y un número indeterminado de personas siguen retenidas como rehenes.